Joshua Nkomo será juzgado, anuncia el primer ministro de Zimbabue

Robert Mugabe, primer ministro de Zimbabue, anunció este fin de semana en Melsetter, localidad situada en el este del país, que Joshua Nkomo, dirigente del Frente Patriótico (PF, nacionalista moderado), recientemente excluido del Gobierno, será juzgado en los próximos días.Nkomo, ex dirigente de la guerrilla y ministro sin cartera en el Gobierno de coalición de Salisbury, ha sido acusado de haber escondido armas para utilizarlas porteriormente en un supuesto intento de derrocar al actual régimen.

El primer ministro agregó, durante una reunión política celebrada en Melsetter, que si Joshua Nkomo era reconocido culpable sería encarcelado.

Mugabe precisó también que la policía continuaba su investigación sobre las armas descubiertas el pasado mes de enero en terrenos pertenecientes al líder del PF y a otros destacados miembros de su partido.

Al expulsarle del Gobierno a Joshua Nkomo y tres de sus colegas del PF, el primer ministro de Zimbabue indicó que la justicia seguiría su curso, aunque se negó a precisar si el ministro sin cartera iba a ser juzgado, lo que podría suscitar disturbios en sus feudos.

Pero, en contra de los previsto, el PF hizo el domingo un gesto apaciguador al decidir mantener a tres de sus miembros en el Gobierno a pesar de la expulsión de su líder del Gabinete.

Reunido en su feudo de Bulawayo, el comité central del PF optó por permanecer en el Gobierno junto a la ZANU (Unión Nacional Africana de Zimbabue) de Mugabe.

En la reunión de Bulawayo Nkomo opinó que era ante todo necesario preservar la unidad del país y evitar que la actuación de su partido acabe por originar su desintegración.

La situación política es grave y merece ser examinada con "seriedad y sangre fría", añadió Nkomo ante los delegados de su partido congregados para tomar una decisión sobre su participación en el Gobierno.

Concretamente, el ala radical del Frente Patriótico se alegró de la expulsión del Gabinete de Nkomo y otros tres ministros y deseaba que sus otros cuatro ministros hiciesen lo mismo para tener las manos libres de cara al Gobierno de Mugabe.