Satisfacción argelina por la decisión de la OUA

Partidarios y enemigos de la admisión de la República Arabe Saharaui Democrática (RASD) en el seno de la Organización para la Unidad Africana (OUA) continuaron ayer enfrentados, haciendo más profundas las divisiones que minan la organización africana. Argelia, a través de varios editoriales de la Prensa oficialista, ha mostrado su satisfacción ante lo que considera la entrada definitiva de la república fundada por el Frente Polisario como el miembro número 51 de la OUA.La secretaría general de la OUA, en una nota distribuida en la capital etíope, reiteró que la presencia de la RASD responde al contenido del artículo 28 de la carta africana, según el cual el procedimiento de admisión de un nuevo miembro no es competencia de los jefes de Estado ni del consejo ministerial o el presidente en ejercicio, sino que depende de un mecanismo administrativo, destinado a comprobar la existencia de una mayoría en favor del Estado postulante.

El diario gubernamental El Mudjahid afirma que la OUA ha puesto término a toda interpretación falsa al conceder a la república saharaui su "plaza legítima en el seno del concierto africano".

El Frente Polisario ha subrayado, por su parte, que la notificación de la entrada de la RASD fue hecha oficialmente por el secretario general de la OUA, Edem Kodjo. Las delegaciones marroquí y saharaui aparecían ayer sentadas, por primera vez en los anales de esa organización, y separadas en razón del orden alfabético empleado en la distribución de lugares.

"La admisión de la República árabe Saharaui Democrática (RASD) es irreversible", aseguraba ante los periodistas el ministro de Información saharaui, Salem uld Saleck.

La satisfacción argelina, aunque no sea excesiva, denota que lo ocurrido en la capital de Etiopía es considerado como un éxito de envergadura, en el sentido de introducir en el conflicto del Sahara Occidental una clarificación: la guerra, según la Prensa oficial de Argel, enfrenta a dos Estados soberanos, identificados por la OUA y, por tanto, Marruecos no puede pretender que este conflicto procede de una diferencia bilateral con Mauritania o Argelia.

"La RASD ha quedado inscrita, a pesar de lo que pueda decir en el futuro el réy Hassan II", subraya El Mudjahid. El citado periódico asegura que, al coincidir con un nuevo aniversario de la fundación de la RASD, la decisión de Addis Abeba sería uno de los mejores homenajes que puede rendirse "a la lucha del pueblo saharaui".