La Jornada de Solidaridad con Polonia organizada por Reagan levanta las iras de las autoridades polacas y soviéticas
Estados Unidos celebró ayer, por iniciativa de su presidente, Ronald Reagan, una Jornada de Solidaridad con Polonia, que levantó las iras no sólo de las autoridades polacas, sino de las soviéticas. En Chicago, "la segunda ciudad polaca del mundo" el secretario de Estado, Alexander Haig, se reunió con los principales dirigentes de la organización sindical AFL-CIO y, ante 10.000 obreros norteamericanos y simpatizantes de Polonia, expresó su apoyo a los miembros del sindicato Solidaridad, "suspendido" por las autoridades militares polacas.
El plato fuerte de la jornada fué la grabación, para su transmisión hoy vía satélite a todo el mundo, de un espectáculo de televisión digno de los años dora dos de Hollywood. Su organización ha corrido a cargo de la USICA (Agencia Internacional de Comunicaciones de Estado Unidos), dependiente del Gobierno norteamericano.En el programa, y junto a famosos artistas (Bob Hope, Glenda Jackson, Charlton Heston, Kirk Douglas y Frank Sinatra, entre otros muchos), intervendrán los jefes de Estado o de Gobierno de doce países, incluido España. Leopoldo Calvo Sotelo reafirmará la condena española del golpe militar en Polonia. La grabación se realizó en La Moncloa el pasado jueves. Televisión Española emitirá el espectáculo mítin a las ocho de la tarde de hoy.En Chicago, Haig recalcó que la imposición de la ley marcial en Polonia "ha proyectado una sombra larga y tétrica sobre las relaciones Este-Oeste". El secretario de Estado leyó ante los congregados, que enarbolaban banderas rojiblancas y entonaban canciones polacas, un mensaje del presidente Reagan, en el que se pedía el fin del estado de sitio, la liberación de los sindicalistas detenidos (entre los que se encuentra el presidente de Solidaridad, Lech Walesa) y la "reapertura del diálogo interno". "Existe tal espíritu de solidaridad hoy en el mundo que no puede cuaja ninguna maniobra de intimidación".
Con el título "Guión y realización: Ronald Reagan", la televisión polaca ha preparado, también para hoy, una réplica al programa norteamericano. Un grupo de parlamentarios polacos ha protestado ante el Congreso de Estados Unidos, calificando la emisión de "intolerable intromisión en los asuntos internos de Polonia".
Mientras tanto, en Moscú, la agencia oficial de noticias Tass se burlaba ayer del espectáculo, y explicaba que en él participan "mafiosos" como Frank Sinatra y "famosos reaccionarios" como Bob Hope.
La agencia Tass expresaba asimismo, su "asombro" ante el hecho de que "los dirigentes de ciertos países o(,cidentales, en especial el canciller de la RFA, Helmut Schmidt", intervengan en el programa de televisión norteamericano. En una información fechada en Washington, en la que se hace gala de una gran dosis de ironía, su corresponsal recalca la existencia "de estrechos lazos entre la capital de Estados Unidos y la, del show business norteamericzino", haciendo referencia al pasado de Reagan como "actor de Hollywood".
"El propio presidente Reagan representará el papel protagonista" y "con el profesionalismo que le es propio, llorará cálidas lágrimas sobre la contrarrevolución polaca y calumniará al sistema socialista, así como al Gobierno polaco".
El objetivo del programa de televisión, según sus organizadores, es "expresar el apoyo de todo el mundo libre a los polacos". No se sabe si por el interés que ofrece el espectáculo o por el temor de que las televisiones del resto del mundo no lo emitieran, la Administración pidió al Congreso su aprobación para su retransmisión en Estados Unidos.
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