La necrópolis de García Nava
En el artículo que firmaba Pedro Montoliú en el que se trataba el asunto del Panteón de Hombres Ilustres de Madrid se alude a Fernando Arbós como autor de la necrópolis del Este de la capital.Tal dato carece de certitud, ya que tan sólo puede considerarse a Arbós como ganador del proyecto de 1877, promovido por el Ayuntamiento de Madrid, y ni siquiera en la totalidad, ya que a tal concurso se presentó junto al arquitecto José Urioste.
Su labor en la obra fue prácticamente nula, ya que sucesivos retrasos en las obras hicieron que se debiera replantear la obra. El 25 de septiembre de 1905, Francisco García Nava presentó su memoria, y sólo este arquitecto puede tener la consideración de proyectista y constructor de la obra que se trata. De hecho, como prueba, cuando se inaugura oficialmente el cementerio (1925) pasaban ya seis años de la muerte de Arbós.
Francisco G. Nava será el verdadero diseñador de la planta y de una serie de elementos arquitectónicos adicionales (pórticos, depósitos, capilla, etcétera), así como de la remodelación de la planificación de sepulturas. El proyecto Arbós-Urioste nunca fue llevado a cabo, y seguir, por error, considerando a éstos como autores de la necrópolis es lamentable y comprensible, dentro de la ausencia de estudios existentes sobre la construcción de tal conjunto.
Fue Francisco G. Nava quien proyectó y ejecutó la necrópolis, quien resolvió todos los problemas arquitectónicos de un modo genial. Francisco García Nava, genial modernista, es uno de esos olvidados por este y por todos los ayuntamientos de Madrid, tan acostumbrados a las medallas, calles, loores y otros olvidos./
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