El Gobierno avalará la construcción de 398 viviendas municipales

El Consejo de Ministros, en la reunión que celebrará el próximo día 11, aprobará, casi con toda seguridad, la prestación del aval necesario para que el Ayuntamiento de Madrid pueda acudir al préstamo hipotecario que le permita la construcción de 398 nuevas viviendas en la ciudad, en terrenos de su propiedad, con destino a familias que actualmente disponen de una mala ubicación -como es el caso de la Colonia Molinos de Viento, en el Alto de Extremadura- o que viven en pensiones pagadas por la Corporación municipal como consecuencia del desahucio de que fueron objeto al ser declaradas las viviendas que antiguamente ocupaban en estado de ruina.

Con la aprobación de este aval terminará una breve fase de crisis en las relaciones entre el Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo (MOPU) y el Ayuntamiento de Madrid, nacida de la escasa disponibilidad económica del Instituto para la Promoción Pública de la Vivienda (IPPV), que llevó a que se temiera, por parte de los ediles, la cancelación del compromiso de construcción de esas viviendas, toda vez que la financiación de los 1.034 millones de pesetas necesarios resultaba imposible.La facilitación de la financiación necesaria para que el Ayuntamiento construyera cuatrocientas viviendas en el casco urbano, al margen del gran programa de remodelaciones iniciado por el Ministerio, surgió del convenio firmado entre el MOPU y la Corporación municipal. Sin embargo, el presidente del IPPV, Manuel de Vicente, argumentó, llegada la hora de la transferencia económica, que el citado convenio no era más que una declaración de intenciones y que, por tanto, no suponía ningún compromiso para el Ministerio. Habida cuenta de este argumento, la falta de disponibilidad económica por parte del Instituto hizo que el tema quedara aparcado.

De todas las promociones que habían sido incluidas en el paquete de las cuatrocientas viviendas, como en seguida comenzó a ser conocido el proyecto, sólo una pudo continuar adelante, habida cuenta de que habían sido hasta contratadas las obras. Se trata del polígono 43 de la avenida de La Paz, en el distrito de Vallecas, donde está prevista la construcción de 128 viviendas.

Pero otras promociones de las proyectadas no corrieron la misma suerte y se temió por su futuro final. Por ejemplo, la colonia Molinos de Viento, en el Alto de Extremadura. En ella viven unas 150 familias, para las que el Ayuntamiento había hecho un programa de remodelación consistente en la construcción de 72 nuevas viviendas en un solar que había comprado al MOPU en once millones de pesetas y en la rehabilitación de las viviendas ahora existentes, doblando en muchos casos su superficie útil.

Posibilidad de fraccionar el dinero

Ante la posibilidad de que el dinero necesario para acometer seriamente las obras de construcción de las 398 viviendas no llegara, el Ayuntamiento llegó a plantear que no necesitaba todo el dinero, los 1.034 millones de pesetas de una vez, sino que su entrega podría fraccionarse. Este fraccionamiento, ofrecido por el presidente del Instituto Municipal de la Vivienda, Valentín Medel, consistía en la entrega de 129 millones de pesetas en este año de 1981; 802, en 1982, y el resto, 103 millones, en el año 1983.Sin embargo, según palabras del propio Medel, la voluntad de diálogo superó las diferencias entre Ayuntamiento y Ministerio, y las conversaciones continuaron en todo momento hasta llegar al momento actual, en el que parece ser que el Consejo de Ministros aprobará, en su sesión del viernes próximo, el aval necesario para todo el programa de construcción.

De todas maneras, el Ayuntamiento no quiere iniciar las obras previstas ni contratarlas hasta tanto no tenga la completa seguridad de que el préstamo que le habrá de facilitar la culminación del proyecto está a su disposición.

El programa elaborado por el Ayuntamiento para la construcción de esas 398 viviendas supone buscar una solución, aunque de momento sea parcial, a uno de los problemas heredados por la actual Corporación, al tener que pagar el coste de alojamiento en una pensión a un buen número de ciudadanos que hubieron de abandonar precipitadamente las viviendas que ocupaban, al ser declaradas éstas en ruina inminente.

Este es el caso, sobre todo, de las dieciséis viviendas a construir en la plaza de la Cebada y de las 46 de San Francisco.

Con todo, las viviendas que la Corporación quiere edificar en la ciudad tienen, desde un principio, adjudicatario y no habrán de salir al mercado inmobiliario ni están pendientes de que se elaboren listas de destinatarios de las viviendas, como en otros casos de operaciones de remodelación urbanística.