Beguin y Peres proyectan formar un Gobierno de coalición en Israel

El primer ministro israelí, Menájeni Beguin, y el líder de la oposición laborista, Shimon Peres, se reunirán en breve para concretar la formación de un Gobierno de unidad nacional, según reveló ayer Radio Israel. La noticia no fue desmentida por el Partido Laborista, que cuenta con 48 diputados sobre un total de 120 del Kneset (Parlamento).La formación de este Gabinete unitario, respaldado por el Likud, coalición electoral dirigida por Beguin, y por su principal adversario, Shimon Peres, máximo responsable del principal partido israelí, provocaría, casi seguramente, una escisión en el seno del laborismo.

En el mencionado Gabinete, Peres ostentaría la vicepresidencia del Gobierno y otras cinco personalidades laboristas asumirían otras tantas carteras de Estado.

La oposición de izquierdas habría planteado tres condiciones para aceptar formar parte del Gobierno Beguin: congelar la creación de asentamientos judíos en las zonas más densamente pobladas por árabes de Cisjordania, el abandono de la doctrina oficial sobre las fronteras de la "Tierra Prometida de Israel" y la anulación de las concesiones en materia religiosa efectuadas a los representantes parlamentarios de los judíos ortodoxos israelíes.

El número dos del Partido Laborista, Isaac Rabin, brindó ayer públicamente su apoyo a la formación de una gran coalición gubernamental; pero Victor Shem Tov máximo dirigente del ala izquierda del laborismo (MAPAM), que cuenta con ocho diputados, aseguró que tal tipo de Gabinete sería de "paralización nacional y no de unidad nacional".

Hace cinco meses Beguin propuso ya a Peres constituir un Gobierno de unidad nacional, pero éste lo rechazó. "Las circunstancias son hoy diferentes, e Israel debe tomar medidas espectaculares antes de evacuar definitivamente el Sinaí en abril", declaró Isaac Rabin.

Aparte de la preocupación suscitada por la devolución a Egipto de la última parte del Sinai, la venta a Arabia Saudí de aviones de vigilancia electrónica AWACS, el creciente eco obtenido por el plan de paz saudí presentado por el príncipe Falid la inestabilidad política egipcia son los problemas que incitan a la clase política israelí a querer formar una coalición gubernamental más amplia.