España, Francia y el Mercado Común

El nuevo Gobierno francés de François Mitterrand parece jugar al ratón y al gato con España acerca de su entrada en la Comunidad Europea. Leopoldo Calvo Sotelo, el primer ministro español, fue uno de los primeros líderes que visitó al presidente Mitterrand después de su elección. Fue recibido cordialmente y le aseguró el presidente francés que Francia no bloquearía la entrada de España, como lo hizo el presidente Giscard.Por esta razón, constituyó un choque duro para los españoles cuando el 13 de julio, en la primera ronda de negociaciones, se les dijo que Francia continuaba bloqueando el avance en la negociación de dos importantes problemas: agricultura y unión aduanera. ( ... )

Los españoles, heridos y desconcertados, rehusaron creer en un doble juego de Mitterrand. Su explicación fue que ministros nuevos y poco experimentados habían sido influidos por sus consejeros oficiales. Será necesario cierto tiempo todavía para que la voluntad política del presidente penetre a través de los departamentos ministeriales.

Tal vez. Pero una dura lucha ministerial se ha desarrollado dentro del equipo de Mitterrand. Claude Cheysson, el ministro de Asuntos Exteriores y ex comisario del Mercado Común, ha propugnado con energía en favor de una respuesta favorable al ingreso de los españoles. Tiene el apoyo de otros ministros europeístas, como Jacques Delors, el ministro de Hacienda, y Michel Rocard, el ministro del Plan. En la dirección opuesta se encuentran los minlstros más vinculados con los intereses de los agricultores franceses, que serían los primeros en sufrir las consecuencias de la competencia española una vez que bajen las barreras aduaneras. La señora Edith Cresson dlrige la lucha contra los españoles. ( ... ) .

6 de octubre