Los laboristas británicos aprueban el desanne nuclear unilateral

El congreso laborista, reunido en Brighton, aprobó ayer una resolución a favor del desarme nuclear unilateral, del cierre de las bases extranjeras y de la creación de ayuntamientos desnuclearizados, y mostró asimismo su oposición a la modernización del sistema estratégico británico y a la instalación de misiles de crucero en su territorio. La salida británica de la OTAN resultó mayoritariamente derrotada. No es, sin embargo, probable que el desarme nuclear unilateral forme parte del próximo programa electoral del Partido Laborista.El debate corrió por la senda de las emociones más que por la del análisis. Para algunos oradores, la disuasión nuclear británica carece de credibilidad y de independencia. Las armas nucleares, británicas y estadounidenses, instaladas en el Reino Unido, tan sólo convierten a este país en un blanco. Otros opinan que no se puede esperar al recurso necesario de un desarme multilateral. El congreso pidió, pues, a la ejecutiva, que incluyera en el próximo manifiesto electoral un firme compromiso para el desarme nuclear unilateral.

Esta resolución, que incluía la oposición a los sistemas estratégico-nucleares Trident, a los misiles de crucero y a la bomba de neutrones, y que contemplaba una reducción en los gastos militares británicos al nivel del resto de Europa, fue aprobada por una mayoría que no alcanzó los dos tercios necesarios para convertirla en política de partido. Por ello, se puede asegurar ya, como señaló ayer Denis Healey, el líder adjunto, que el Partido Laborista no irá a las próximas elecciones con tal propuesta.

Desnuclearización

El congreso apeló a que los ayuntamientos controlados por laboristas declarasen desnuclearizadas todas las zonas bajo su jurisdicción, oponiéndose a los gastos destinados a una "imposible" de fensa civil, en caso de una guerra nuclear. Aunque estas mociones no tengan ninguna consecuencia inmediata, sí muestran la fuerza que han recobrado en el Reino Unido los movimientos contra las armas nucleares. Resultó impre sionante la recepción de que fue objeto Tony Benn el lunes en un mitin marginal sobre el desarme nuclear, y Benn, aunque a favor de este desarme, no es un pacifista.

Tras las frecuentes discusiones sobre una guerra nuclear limitada -y no sobre una guerra nuclear imposible-, el movimiento desarmamentista ha cobrado un nuevo vigor.

No sin una cierta polémica, fue derrotada una resolución pidiendo que el Reino Unido dejara de ser parte de la OTAN. En el debate se citó a Denis Healey, conocido por su oposición a los unilateralistas, para quien es incoherente mantener esta postura y atacar a la OTAN.

Healey mantuvo un sombrío silencio durante la votación. La resolución fue aprobada a mano alzada, pero tras un alboroto, se procedió a una votación secreta: cinco a uno en contra. El congreso había aprobado anteriormente el informe de su ejecutiva, en el que se habla del papel de la OTAN como instrumento de distensión y de defensa. No bastó para que salieran a la luz algunas tendencias antiamericanas.