Aparcar en el centro costará diez pesetas más a partir del próximo enero

Las tarifas de la Operación de Regulación de Aparcamiento (ORA) o verán incrementadas a partir el próximo 1 de enero en una cantidad que podría estar en torno a las diez pesetas por cada hora de aparcamiento realizado. De esta forma el bono de aparcamiento para media hora costaría veinte pesetas, en lugar de las quince actuales; el de una hora pasaría de treinta a cuarenta pesetas, y las tarjetas de una hora y media valdrían sesenta pesetas, frente a las 45 vigentes. Los residentes con tarjeta podrían verse obligados a pagar una cantidad superior a las mil pesetas, frente a las novecientas que pagan en la actualidad.

El Gabinete de Coordinación del Ayuntamiento trató ayer, entre otros temas, la necesidad de conseguir un equilibrio financiero en el sistema ORA para el próximo ejercicio. Para ello, los técnicos de la Delegación de Circulación y Transportes estudian desde ace mas semanas la cuantía en la que habrá que aumentar las tasas vigentes.

Aunque en principio parece que aparcar durante una hora valdrá díez pesetas más que en la actualidad, la decisión dependerá, en parte, de si se amplía o no la operación a nuevos barrios y del déficit definitivo con que se termine este año. Según las previsiones hechas por el Ayuntamiento para 1981, la operación iba a suponer unos gastos de 806 millones de pesetas frente a unos ingresos de cuatrocientos millones de pesetas.

En principio, la ampliación de la zona afectada por la ORA no está decidida, ya que los responsables municipales tienen que resolver previamente problemas tales como la falta de personal para hacer frente a una tercera fase o la necesidad de hacer cumplir la ordenanza a todos los infractores mediante un proceso más idóneo para el cobro de multas.

Entre los problemas que conlleva la ampliación de la Ora está el de la falta de vigilantes, ya que parece que con la realizada el pasado mes de mayo, terminó la reestructuración de la plantilla de la Empresa Municipal de Transportes (EMT). Antes de que en noviembre del año pasado se aplicara esta operación, fuentes municipales informaban que había unos mil trabajadores infrautilizados, cifra que se vió sensiblemente reducida, ya que en las dos primeras fases 835 personas, entre trabajadores de la EMT y empleados procedentes de las antiguas líneas periféricas, pasaron a ocuparse de la vigilancia de vehículos.

Según informaron fuentes próximas a la dirección de la EMT, cualquier ampliación de la ORA que se produjera a partir de este momento, conllevaría la necesidad de contratar nuevos trabajadores, lo que supondría incrementar los costes de personal.