Menos "Kung-fú" " y más democracia
Los 411 policías de barrio que a partir del próximo martes podrán verse por alguno de los seis distritos (Fuencarral, Hortaleza, Centro, Arganzuela, Carabanchel y Villaverde) en los que de manera experimental iniciarán este nuevo servicio, con el que comienza a cambiar la imagen del tradicional policía municipal, nada tiene que ver con el estereotipo del cínematográfico Kung-fú, con el que algunos sectores contrarios a esta nueva orientación policial han tratado de identificarles. Básicamente, se trata de la readaptación del policía municipal a unas nuevas funciones que le acercan al colectivo hacia el que va orientada su función: la ciudadanía.De los 411 policías que integran la última promoción del cuerpo, formada integramente para los nuevos cometidos, doscientos serán destinados a las unidades de protección ciudadana; cuarenta, a la unidad motorizada de circulación; veinte, al control de la venta ambulante, y tan sólo veintidós de ellos patrullarán por los seis distritos que, en un principio, se han escogido para poner en práctica la policía de barrio.
Entre las funciones de estos policías figura, por lo que se refiere a la organización de la sociedad, la protección de vidas, bienes y ejercicio de las libertades y derechos de los ciudadanos, además de potenciar el bienestar social y la propia organización social.
En opinión del equipo de gobierno del Ayuntamiento, estas funciones, aunque no estén reglamentadas específicamente, forman parte de la función policial, entendida democráticamente.
Respecto a las funciones relacionadas con la desviación social los policías de barrio se dedicará a actividades de carácter preventivo mediante la participación en programas de prevención de las inadaptaciones, y especialmente en las de carácter juvenil. Participarán también en la atención general a la marginación social y potenciarán la ejecución de las actividades y decisiones administrativas relacionadas con la erradicación de las causas de marginación social.
Las funciones relacionadas con la policía Judicial abarcan el patrullaje preventivo y defensivo, la detención de presuntos delincuentes y la atención a las víctimas de accidentes.
Por último, los policías de barrio tendrán como funciones toda las relacionadas con la Administración municipal, tales como v lar por el cumplimiento de las ordenanzas, bandos y reglamento inspección del estado de conservación, seguridad y ornato de os inmuebles públicos y privados; denunciar las actividades consideradas molestas, insalubres, nocivas o peligrosas; vigilar la convivencia ciudadana, actuando en todas aquellas situaciones que sea necesario, y colaborar con los cuerpos de seguridad del Estado, además de la vigilancia y ordenación de tráfico y transporte e información y auxilio a los ciudadanos.
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