_
_
_
_
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

El derecho al referéndum

Candente tema el del ingreso en la OTAN. Y más candente aún cuando parece que a nosotros, a los españoles sin autoridad ni influencias, nadie pretende preguntarnos.Eso sí, para demostrar, supongo, que hay opiniones a favor se ha consultado a las Fuerzas Armadas, consulta que, por el muy obvio carácter militarista Je las mismas, resulta a todas luces capciosa. Es como preguntar a Alfredo La rida (con todos mis respetos) si quiere interpretar un pitpel de miportancia en una superproducción de Hollywood. Un trámite que podían haberse ahorrado, sobre todo teniendo en cuenta que el Ejército no debiera ser una fuerza política.

Sabe el Gobierno centrista que en el Senado v en el Conoreso contaría probablemente con la mayoría (cuya relatividad será digna de verse), a pesar de la oposición de comunistas y, socialistas. Pero olvida a todos los grupos extraparlamentarios y cuyos Militantes y simpatizantes suman en conjunto, a buen seguro, un número no despreciable. Olvida a quien no votó (un alto porcentaje) y puede ahora, ante la grave importancia del asunto, tener algo que decir. Olvida a quien votó UCD sin total convencimiento o clarificación de ideas, bien deslumbrados por la campaña comercialmente mejor estudiada (una campaña electoral es algo que incluye extensos estudios de marketing y un profundo

Pasa a la página 8

Viene de la página 7

conocimiento de los efectos subliminales de la publicidad, todo ello dirigido a la venta de un producto: el candidato), bien buscando la solución intermedia (otro truco publicitario) que intentara conciliar tendencias opuestas, evitando así enfrentamientos, bien reconociéndola como un mal menor, o bien asimilando su imagen de ejecutivos modernos, grandes conocedores de las leyes del marketing internacional, y confiando en que UCD procurara a España la germinación de una floreciente economía; los cuales, por otra parte, ya estarán desengañados. Olvida los movimientos pacifistas, cada vez más numerosos, y la voluntad de quienes, sin pertenecer a estos movímientos, sólo desean vivir tranquilos y sin violencias. Para todos ellos, el olvido.

El Gobierno UCD toma y maneja el poder a su antojo, olvidando que cuando el ciudadano acude a las urnas no está delegaildo sus poderes en los elegidos, sino eligiendo unos representantes que día a día deben confirinar su validez actuando como tales; es decir, basándose únicaniente en los deseos de los ciudadanos y respetándolos con toda hon estidad. Y olvida que, cuando, fue elegido, el tema OTAN, aun circulando ya y antes ,aún, en las mentes de la clase política, era un dilema que no había abordado aún al hombre de la calle: nadie votaba OTAN, sí, u OTAN, no. Y por ello ni siquiera la unanimidad de las fuerzas parlamentarias sería, en este caso, representativa de la voluntad del pueblo.

El señor Calvo Sotelo,y su camarilla, con una negativa al referéndum que no tiene ni la decencia de reconocerse a sí misma, pues por no hacer ni descarta la posibilidad para no reconocerla, para seguir ignorándola, están pisoteando nuestra voluntad, aun suponiendo que estuviera de su parte. Están violando los más elementales valores democráticos de representatlvidad, están ostentando el poder de la forma más autoritaria, digna de pasadas épocas, cuando sólo la represetitatividad confiere su valor a la democracia.

Por todo ello, mi más rotundo, tajante, imparcial y bienintencionado al referéndum sobre el nigreso de España en la OTAN.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_