Posibles cambios al frente de la Junta salvadoreña

La guerra declarada por los más importantes empresarios salvadoreños al presidente José Napoleón Duarte, al que culpan de la grave crisis económica que padece su país, puede costarle el cargo al líder democristiano, que preside la Junta desde diciembre del pasado año. Fuentes próximas a la Embajada de Estados Unidos apuntan como probable sustituto al abogado René Fortin, líder del partido Conservación Democrática. El relevo podría producirse en una semana.

El dirigente de este nuevo partido, constituido por empresarios y profesionales para participar en las elecciones constituyentes previstas para el próximo mes de marzo, ha declarado que estaría dispuesto a integrarse en la Junta si se le garantiza "cierta cuota de poder y cambios en el Gabinete".

Los empresarios acusan a Duarte de llevar a cabo una política socializante en un intento de arrebatar banderas a la izquierda. Para la Alianza Productiva, patronal que agrupa a los empresarios más derechistas, no hay diferencias sensibles entre el comunitarismo de Duarte y el comunismo de la guerrilla.

Alianza Productiva y Acción Democrática proponen una política económica rigurosamente neoliberal. Sólo así se reactivaría la inversión. Duarte opina que el causante de la crisis es la guerra civil y que sólo la paz puede levantar la economía.

Nadie niega la realidad de una bancarrota que se traduce en un producto interno bruto inferior al de 1976, una renta per cápita que está ya por debajo de los niveles de 1974 y el cierre de una de cada cinco empresas industriales.

La última palabra para la remodelación del Gobierno la tienen los militares, que necesitan el apoyo empresarial para proseguir una guerra que dura ya seis meses. La oferta de Rubén Zamora, dirigente del Frente Democrático Revolucionario, de negociar directamente con la Junta el término de la guerra, parece condenada al fracaso.