La junta militar boliviana confirma a García Meza en la presidencia de la República

El general Luis García Meza fue confirmado el viernes en La Paz como jefe del Estado y presidente de la República de Bolivia por parte de los tres jefes del Ejército, la Aviación y la Marina, que subrayaron que es la junta militar y no García Meza quienes constituyen el supremo órgano dirigente boliviano. La junta de comandantes de las Fuerzas Armadas "podrá relevar de sus funciones al presidente de la República si las razones de Estado lo exigen", según un comunicado oficial.

Por otra parte, el dirigente sindical de la Central Unica de Trabajadores del Campo y de la Central Obrera Boliviana, ambas ilegalizadas, Genaro Flores, herido y encarcelado el pasado 19 de junio, abandonó el jueves La Paz con destino a Estados Unidos. Flores, que resultó gravemente herido durante su detención, contó para su liberación con las gestiones de la Nunciatura Apostólica y la Embajada de Francia.La confirmación de García Meza como jefe del Estado parece obedecer a una fórmula de acuerdo en el seno de las Fuerzas Armadas, cuya cúpula refleja ahora un mayor grado de unidad tras los recientes pronunciamientos militares contra el general García Meza, que resultaron frustrados.

De este modo, todos los comandantes de unidades militares que intervinieron en la intentona militar del pasado 27 de junio, protagonizada por el comandante en jefe y el jefe del Estado Mayor del Ejército, generales Humberto Cayoja y Lucio Añez, han sido reemplazados por militares fieles al régimen, mientras que los líderes de la sublevación y cuatro generales más han sido deportados a Argentina.

Igualmente, a finales de mayo otra intentona militar semejante, iniciada en la guarnición de Cochabamba por el teniente coronel Emilio Lanza, provocó importantes cambios en los principales acuartelamientos del país.

García Meza, por su parte, había anunciado entonces que abandonaría el poder antes del próximo 6 de agosto, si bien más tarde aseguró que "si el pueblo me lo exige unánimemente, permeneceré al frente de la nación". Poco después, la televisión boliviana comenzó a programar espacios dedicados al general García Meza y de apoyo de su gestión presidencial, así como mensajes publicitarios en los que el presidente ahora confirmado aparecía en familia o haciendo deporte.