El Rey resalta la función de la Corona en la política exterior
El Rey presidió ayer el acto de clausura de los cursos de la Escuela Diplomática en el año académico 1980-1981. En su discurso, don Juan Carlos resaltó que «nuestro texto constitucional reafirma la relación tradicionalmente establecida entre la Corona y quienes han de representar a España en el exterior»
En el mismo sentido, dijo el Rey que asumía, en la línea de la tradición y en virtud del mandato constitucional, «la más alta representación del Estado español en las relaciones internacionales, con una expresa y especial atención hacia las naciones de nuestra comunidad histórica».Por ello afirmó que «me he de sentir muy próximo a quienes integran nuestro servicio diplomático», y agregó que «he de seguir también, en consecuencia, con el natural interés, el proceso de selección y formación de aquellos que se preparan en estas aulas para tener el honor de formar parte del mismo».
Don Juan Carlos subrayó después la misión de la diplomacia de hacer una «denodada defensa» de los legítimos intereses del Estado y de todos los españoles, pero advirtió que las grandes cuestiones de la política internacional «no debe haceros relegar jamás la acuciante preocupación por el bienestar de todos y cada uno de los españoles», sino que se debe prestar «una constante atención a la difícil batalla diaria de nuestros compatriotas, que viven y trabajan en el exterior o que se esfuerzan por incrementar, en el campo de la cultura o la economía, la presencia española en el mundo».
Más adelante dijo el Rey que no se puede ignorar que, «por un conjunto de razones históricas, hemos vivido largos períodos de nuestra trayectoria contemporánea alejados de una normal vida de relación internacional. Y como fenómeno reflejo, carecemos hoy del hábito de dedicar a la acción exterior la atención y los medios proporcionados a los fines que nos proponemos».
En el acto intervino también el ministro de Asuntos Exteriores, José Pedro Pérez-Llorca, quien manifestó, que la profesión de diplomáticos es difícil en un mundo tan conflictivo y de cambiante realidad como el que vivimos, y que es necesaria una política digna y eficaz.
Este tipo de política, dijo el ministro, es clave dentro del proyecto político general del Gobierno, que ve en la cooperación internacional la posible solución de los grandes problemas del mundo.
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