Deslucida corrida de la Prensa
Los Galache, justos de casi todo, con nota mínima para bravura y fuerza, echaron por tierra el resultado artístico de la corrida de la Prensa valenciana.Las orejas cortadas por Dámaso González y Niño de la Capea, no son s, no el reflejo de la buena disposición de un público que había acudido a aplaudir a su ídolo, Dámaso, después del éxito madrileño, y a un Niño de la Capea que, con su avispado comportamiento, se está metiendo a esta afición en un bolsillo. En ningún caso los trofeos han estado justificados, entre otras razones porque los toros no tenían importancia.
Y así las cosas, cuando en la tarde pintaban bastos, el sobresaliente se rebela y se va a la puerta de chiqueros a esperar al sexto aporta gavola. El torilero tuvo tiempo de atender la orden del delegado gubernativo y no abrió. Llegó la bronca de un público sensiblero, pero todo se arregló cuando el Niño de la Capea le dejó hacer un quite.
Plaza de Valencia
Corrida de la Prensa. Toros de Francisco Galache, flojos y con poca casta. Dámaso González: Ovación, oreja y silencio. Niño de la Capea: Oreja, aplausos y palmas.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.