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Un coleccionista anónimo pagó en Nueva York 482 millones de pesetas por un autorretrato de Picasso

Es el precio más alto para una obra de un artista del siglo XX

Cuatrocientos ochenta y dos millones de pesetas pagó ayer, en Nueva York, un coleccionista anónimo europeo por un autorretrato que Picasso pintó en 1901, su época azul. El remate fue realizado por la casa Sotheby's en un ambiente de gran expectación y en el marco de una emoción que no puede describirse.

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Fiebre en el mercado

Es el precio más alto jamás pagado por una obra de Picasso y de cualquier artista del siglo XX. Doscientos setenta millones de pesetas fueron pagados hace un año por otro cuadro de Picasso, en la misma casa de remates de la citada ciudad norteamericana.Lo pagado por el autorretrato de Picasso establece otro récord: es el cuarto precio más alto en la historia de las subastas. Un cuadro de Turner logró 576 millones de pesetas, un Velázquez fue subastado por 495 millones de pesetas y un Rubens obtuvo algo más de 100.000 pesetas por debajo del último de los precios mencionados.

La emoción que se alcanzó en la sala de subastas en el curso de la puja por el autorretrato de Picasso fue incrementada por una circunstancia trivial: el representante del personaje que compró finalmente el cuadro estuvo en permanente contacto telefónico con el que dirigía su actuación.

El precio básico por el que se ofreció la obra fue de noventa millones de pesetas. Se calculó, en un principio, que podía haber llegado a los 180 o doscientos millones de pesetas. El récord alcanzado ha sorprendido, pues, a la propia empresa.

Según Efe, en Nueva York ni los más fervientes admiradores de Picasso pudieron imaginar nunca que el autorretrato iba a alcanzar la suma fabulosa de los 482 millones de pesetas. El comprador, un anónimo coleccionista europeo que tiene intereses en Nueva York rompió el secreto de sus intenciones a los pocos segundos de iniciarse la puja. Había tres coleccionistas interesados en adjudicarse para sí el codiciado cuadro. Nueve millones de pesetas era la diferencia que cada uno establecía entre sí cada vez que el otro se atrevía a romper el equilibrio.

A los dos minutos de ser iniciada la puja. surgió la proposición final y fue pronunciada en la sala la cifra final: 482 millones de pesetas, que en dólares se traduce en 5.300.000. La suma de otros nueve Picasso vendidos en la misma subasta, conjuntamente con el autorretrato, supera los 650 millones de pesetas.

En la misma subasta, un cuadro de Renoir fue comprado por un museo alemán por 180 millones de pesetas, mientras que un Juan Gris y un Miró fueron subastados por cantidades importantes dentro de la estimación económica que suelen merecer estos autores. El libro de música, de Juan Gris, fue vendido por 2.250.000 pesetas, mientras que Personage, de Miró, que fue elaborado conjuntamente por él y por el ceramista Arigas, cinco millones de pesetas.

En el lote de Miró figuraban también dos cuadros pintados en marzo de 1948 y son ejemplos típicos del uso de figuras y formas antropomorfas del artista.

Por uno de ellos se pagaron treinta millones de pesetas, y por otro, una cifra inferior en algo menos de medio millón.

El autorretrato de Picasso que fue vendido en Nueva York por 482 millones de pesetas fue pintado en 1901 por el artista, durante su primera visita a París, que coincidió con su época azul. La subasta de este cuadro, que Picasso tituló Yo, coincidió en Nueva York con una cierta crisis de venta de las casas rematadoras, que habían asistido con preocupación a subastas de arte de tiempos paralelos a aquellos que representa la extraordinaria interpretación de sí mismo que hizo el artista malagueño.

La coincidencia de esta subasta con los actos que se celebran en todo el mundo con motivo del centenario del nacimiento de Pablo Picasso ha prestado al acto de Sotheby's una componente emocional que se reflejó en la sala de remates, que albergó uno de los actos del mercado artístico más impresionantes -y más rápidos, por su duración- de este siglo.

La expectativa española

Ciento treinta millones de pesetas estaba dispuesta a pagar la Real Academia de Bellas Artes de España por el autorretrato de Picasso subastado ayer en Nueva York.El director general de Bellas Artes, Javier Tusell, confirmó ayer a Efe que aquella entidad española, que recientemente recibió un importante legado particular, estaba interesada en pujar por el cuadro, que finalmente fue adjudicado por una cantidad casi cuatro veces superior a las expectativas de aquella entidad académica.

Tusell ha dicho que el autorretrato de Picasso tiene el valor de ser único, pero, con respecto al precio que ha alcanzado, ha señalado que quizá la confluencia del centenario ha disparado los precios.

Si la Real Academia de Bellas Artes hubiera sido la pujadora final de la subasta de Nueva York, la cantidad aludida habría sido pagada en un 70% por la citada entidad. El 30% restante habría sido costeado por el Ministerio de Cultura.

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