El 49,5% de los madrileños considera que los problemas de sus municipios han mejorado

Un 49,5% de los 1.200 madrileños encuestados piensa que desde las elecciones municipales del 3 de abril de 1979 los problemas de su municipio 'han mejorado. De ese 49,5%, el 7,1% estima que han mejorado mucho, y el 42,4% restante, que han mejorado algo. Al contrario, un 7,2% de los encuestados considera que los problemas han empeorado mucho, y un 8,6%, que han empeorado algo (en total suman el 15,8% que se muestran desfavorables a los ayuntamientos salidos de las elecciones). Por último, el 34,6% piensa que «todo sigue igual que antes». La encuesta ha sido encargada por la Federación Socialista Madrileña a una empresa especializada, y estos datos constituyen un avance de los resultados.

La encuesta abarca los pueblos más importantes de la provincia de Madrid, excluida la capital, y obedece al interés de la FSM por conocer lo más acertadamente posible el índice de satisfacción con que los ciudadanos han recibido a los nuevos ayuntamientos democráticos.A tenor del avance de resultados, fuentes oficiales de la FSM se mostraron satisfechas, además que otros apartados de las preguntas realizadas a esas 1.200 personas, aproximadamente, permiten conocer también cuáles son los problemas que los habitantes de la provincia consideran como peor resueltos. El final de la encuesta ofrece una traducción política de la satisfacción o descontento de los ciudadanos a la hora de una hipotética consulta electoral, y también en este caso los socialistas se muestran contentos.

Así, el 15,2% de las 1.200 personas consultadas votó a UCD en abril de 1979, y en este momento sólo un 7% mantendría su voto, de donde se deduce, según los términos de la encuesta, que más de la mitad de los votantes ucedistas pasarían a otros partidos o se alinearían en la abstención. Al contrario, en abril de 1979 el 28,1% de los encuestados votó al PSOE, porcentaje que ahora sube hasta el 33,5%.

El PCE continúa manteniendo sus posiciones electorales, con un ligero descenso del 11,5% al 10,3%. Alianza Popular, sin embargo, también experimenta un avance importante, del 1,7% al 4,2%. Los partidos de la izquierda extraparlamentaria (ORT-PTE, MC) no sufren variación apreciable, del 1,3% al 1,2%, mientras que los partidos situados en la extrema derecha (FN, Falange) casi doblan su número de potenciales votantes, pero partiendo de niveles muy bajos: del 1,6% al 2,8%. Las personas que en abril votaron a los independientes mantienen la misma actitud, con un pequeño incremento del 1%, al 1.3%

De las 1.200 personas encuestadas, un 25,1% confiesa que no acudió a votar en las elecciones de 1979. Ahora, ese porcentaje se reduce al 16,7%; pero los que ahora han decidido que sí votarán en las próximas elecciones aún no tienen decidido hacia qué partido inclinarán sus preferencias, puesto que el porcentaje de los que no saben a quien van a votar sube casi exactamente en la misma proporción que bajaron los anteriores, del 14,5% al 22,7%.

Lo mejor, las calles

En las preguntas sectoriales (los problemas de la vivienda, transportes públicos, servicios sanitarios, servicios sociales y públicos) y población marginada (ancianos minusválidos, mendigos) casi la mitad de los encuestados piensan que la situación está más o menos igual que hace dos años. En cambio, un 65,2% estima que el cuidado y mejora de las calles ha ido a mejor, un 56,6% cree asimismo que las escuelas también han mejorado, y lo mismo ocurre en cuanto a creación de parques y zonas verdes.Las bestias negras para los madrileños son el desempleo (un 94,8% de los encuestados considera que la situación ha empeorado), la delincuencia (un 76,4%) y los ruidos y la contaminación (un 50,3%).

Falta de eficacia

Un 40,7% de los consultados que estiman que la gestión municipal ha sido mala piensa que las causas se deben a la falta de eficacia de los concejales y alcaldes otro 29%, a las disputas entre partidos, con la consiguiente falta de colaboración, y, un 18,6% lo achaca directamente a la falta de honestidad de los dirigentes municipales.Entre los que piensan que la gestión municipal sí ha sido positiva en su conjunto, un 21,9% lo achaca a la honestidad de los dirigentes; el 26,9%, a la competencia y eficacia; el 29,2%, a la cooperación entre los diferentes partidos, y un 16,9%, a la colaboración de los ciudadanos y entidades populares.

En cualquier caso, todos los partidos cuentan aún con un margen de confianza de la mayoría de los ciudadanos para enmendar errores. Nada menos que un 66,6% responde que los dos años transcurridos son poco tiempo para resolver los problemas municipales.

Los porcentajes son similares a la hora de valorar los recursos municipales y la ayuda del Gobierno. Casi las dos terceras partes reconocen que los ayuntamientos son pobres y que el Gobierno no se preocupa demasiado por ayudarles.