La Audiencia de Valladolid, favorable a la demolición de un hotel construido con dinero oficial

La Audiencia Territorial de Valladolid ha fallado a favor del Ayuntamiento de Puebla de Lillo (León) en el pleito por la demolición del mayor hotel de la estación invernal de San Isidro, declarado hace años edificio singular por la Comisión Provincial de Turismo y construido, en parte, con créditos oficiales en terrenos urbanizados por la propia Diputación.El pleito entre el Ayuntamiento de Puebla de Lillo, controlado por el PCE a través de una candidatura independiente, y la sociedad Hoteles Leoneses, SL, propíetaria del inmueble, afecta indirectamente a todas las edificaciones de la actual estación de esquí que fueron contruidas en su día sin licencia municipal, acogiéndose a un permiso de la Diputación como promotora.

A finales de 1979, el alcalde de Lillo, Antonio García, ordenó la paralización de todas las obras que se estaban llevando a cabo en San Isidro, y dio un plazo de dos meses a los propietarios y empresas afectados para que regularizaran su situación ante el Ayuntamiento, lo que suponía el pago del 1% de todos los proyectos de edificación (alrededor de cien millones de pesetas sobre un presupuesto municipal de poco más de tres millones). En el lugar han sido contruidos hasta ahora cinco bloques de apartamentos, un hotel y alrededor de quince chalés, al margen de las instalaciones de la Diputación.

Según el alcalde, la reclamación del Ayuntamiento fue aceptada por la mayoría de los propietarios, a excepción de Hoteles Leoneses, cuyas inversiones se estiman, en espera de un peritaje oficial, en unos quinientos millones de pesetas. Esta empresa se negó desde el principio a paralizar las obras, motivo por el cual el Ayuntamiento acordó su demolición, pidiendo incluso el apoyo del Gobierno Civil para hacer efectiva la sanción. El pleito ante la Audiencia de Valladolid, en la Sala de lo Contencioso-Administrativo, era precisamente un recurso empresarial contra esta medida.

Hasta ahora, el Ayuntamiento ha podido recuperar los impuestos equivalentes a la mitad de las construcciones, por cuanto el resto ha caducado a los dos años de su ejecución. Están pendientes de construir, sin embargo, casi las tres cuartas partes de los terrenos urbanizados por la Diputación para chalés y apartamentos.

Otros pleitos

La sentencia de Valladolid se anticipa a otros pleitos entre el Ayuntamiento y Hoteles Leoneses, SL, que todavía están sin resolver -después de un año-, en el juzgado comarcal de Cistierna. Uno de ellos es una denuncia municipal por desobediencia presentada contra la empresa a raíz de la negativia de ésta a regularizar su situación. El otro es una querella de Hoteles Leoneses contra el alcalde por presuntas «coacciones y prevaricación», después de que éste publicara un anuncio sobre la contratación de trabajadores pra demoler el hotel. Se da la circunstancia de que el mismo alcalde está procesado desde hace seis meses por supuestas calumnias a uno de sus antecesores en el cargo, Jaime Alonso, después de que el Ayuntamiento denunciara a un hijo de este último, Jaime Alonso García, jefe nacional de Fuerza Nacional del Trabajo, por intento de agresión y amenazas de muerte. Alrededor de trescientos vecinos llegaron a firmar entonces un escrito pidiendo ser procesados junto con el alcalde para evitar su destitución.Las 2.800 hectáreas de la estación invernal de San Isidro fueron adquiridas en 1969 por la Diputación Provincial en 6,7 millones de pesetas, a iniciativa del entonces presidente Antonio del Valle, cuñado de Arias Navarro.