_
_
_
_
_

Rescatadas todas las víctimas del accidente aéreo de Granada

Finalizaron ayer las tareas de rescate de los cadáveres de la familia que murió el domingo en Sierra Nevada, víctimas de un accidente aéreo, con la recuperación de los cuerpos sin vida de Fernando y Gonzalo Marín Martín, de quince y doce años de edad, respectivamente, y de su padre, Fernando Marín Aznar, de 49 años, que pilotaba la avioneta.Los restos de ambos hermanos fueron trasladados al Instituto Anatómico Forense de la facultad de Medicina de Granada, donde quedaron depositados junto a los de la madre, María Angustias Martín Moreno, de 43 años, y los del hijo menor, Jorge, de ocho años, que habían sido recuperados en la tarde del lunes, después de que un helicóptero de las fuerzas del Servicio Aéreo de Rescate (SAR) localizara los restos de la avioneta siniestrada a más de 3.000 metros de altura.

Aunque todavía no se ha dado una versión oficial sobre el accidente, parece ser que éste se produjo alrededor de las 13.30 horas del domingo, veinte o treinta minutos después de que la familia Marín-Martín partiera del aeropuerto de Granada a bordo de una avioneta particular, con la intención de «comer unos pescaítos en Almería».

Sobre las 13.10 horas, el jefe del aeroclub granadino, Fernando Sánchez Castro, y un instructor de vuelo del mismo, Cecilio Rodríguez, establecieron comunicación por radio con la avioneta y recomendaron prudencia al piloto a causa de las nubes que cubrían la sierra que debían sobrevolar. La alarma del posible siniestro no se dio, sin embargo, hastá última hora de la tarde, al ver que el aparato no regresaba a su base de Granada y comprobar que no había llegado tampoco a su destino inicial en el aeródromo de Cortijo Grande, en la localidad almeriense de Turre.

Nacido en Bédrnar (Jaén), Fernando Marín Aznar era ingeniero técnico de obras públicas y trabajaba como funcionario en la Delegación Provincial del MOPU. Estaba considerado como un piloto consumado, con más de trescientas horas de vuelo, realizadas desde la consecución de su título, a primeros del año 1979. Por su parte, su esposa, María Angustias, granadina, había finalizado asimismo el curso de piloto privado deportivo.

Desaparece un bimotor francés

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Por otra parte, un bimotor francés DC-3, con cuatro o cinco personas a bordo, en vuelo de Orán a Toulouse, desapareció anoche tras haber establecido contacto por radio con Palma de Mallorca y no hacerlo con el control de Barcelona, informa Efe. La última conexión por radio fue muy defectuosa, y cuando el control de Palma llamó de nuevo al avión, ya no pudo conseguir la conexión, pese a que durante tres minutos lo tuvo controlado en el radar. A primeras horas de esta madrugada se procedía a la búsqueda del aparato.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_