Se intensifica la "guerra psicológica" en el interior de UCD

En el interior de Unión de Centro Democrático (UCD) parece no pasar un solo día sin que los diputados de uno u otro sector filtren a los medios de comunicación informaciones interesadas, tendentes todas ellas a incrementar la guerra psicológica y la tensión interior en unos momentos en que el partido del Gobierno parece estar buscando su remodelación definitiva. Así, a los avisos del centrista liberal Emilio Attard («Cualquier grupo de presión interna podría romper UCD»), a las acusaciones de conspiración del duque de Suárez y los mentís de Arias-Salgado, se intensifican ahora las diatribas entre socialdemócratas y democristianos.Ayer, la agencia Europa Press difundía una información de la que no se responsabiliza nadie en concreto, tan sólo «fuentes competentes del sector democristiano», en la que éstos amenazan con boicotear cualquier proyecto de ley que presente el ministro socialdemócrata Francisco Fernández Ordóñez, si no se modifica el proyecto de ley de Divorcio.

Los diputados democristianos del partido del Gobierno, informa la citada agencia, se reunieron ayer en Madrid en un almuerzo de trabajo, en el que acordaron que si no se modifica el actual proyecto de ley de Divorcio, bien en el Senado o bien a su nuevo paso por el Congreso, votarán en los plenos en contra de cualquier artículo de cualquier proyecto de ley que lleve la firma del ministro de Justicia, Francisco Fernández Ordóñez. Si esta afirmación no es una nueva intoxicación, a los medios informativos, la decisión de estos diputados del partido del Gobierno significa que amenazan con votar en contra del proyecto de ley de regulación de los estados de excepción, alarma y sitio, ya que éste corresponde a Justicia.

A este almuerzo de trabajo, siempre según la citada agencia, asistieron dieciséis de los diecinueve miembros del grupo democristiano.

Las fuentes añadieron que su decisión se había adoptado tras constatar su «profunda indignación por el arreglo organizado por el ministro de Justicia con el Grupo Parlamentario Socialista, al promover una votación secreta en la disposición adicional décima del proyecto de ley de Divorcio, en la que se inauguró una nueva mayoría parlamentaria, compuesta por los votos de los partidos de izquierda y los del sector social demócrata de UCD».