El fiscal mantiene su acusación contra un abogado por un delito desaparecido

El ministerio fiscal ha anunciado la intención de mantener su acusación contra el abogado sevillano José Antonio Salazar, que fue procesado por propaganda ilegal en diciembre de 1977, al imputarle ciertos funcionarios de la cárcel de Sevilla la tenencia de varios ejemplares del boletín de la extinguida Afape (Asociación de Familiares de Presos).Junto con el abogado también fue procesado por el mismo delito su cliente, Evaristo Luque, que se encontraba preso en aquellas fechas en la prisión sevillana. Abogado y cliente denunciaron públicamente este hecho como un montaje dirigido contra ellos, lo que le valió a José Antonio Salazar una condena por desacato, y a ambos, un proceso por propaganda ilegal, cuya vista estaba señalada para el pasado día 26 de marzo.

Sin embargo, el juicio no pudo celebrarse al no haber sido trasladado Evaristo Luque desde la cárcel de Burgos, donde está actualmente internado, hasta la Audiencia Provincial de Sevilla, en la que debería haberse celebrado la vista. Llegado el momento del juicio, que finalmente se suspendió por incomparecencia del otro procesado, el ministerio fiscal mantuvo su posición acusatoria, argumentando que, aunque el delito de propaganda ilegal había desaparecido del Código Penal, los hechos imputados a los acusados podrían encuadrarse en otras figuras delictivas vigentes en la fecha de autos y en la actualidad, en concreto, las de apología o provocación para el delito de sedición. En medios jurídicos, en los que se esperaba la retirada de la acusación del fiscal, al haber sido derogado el artículo 251 del Código Penal, que tipificaba el delito de propaganda ilegal, ha causado sorpresa y malestar la persistencia de la acusación por la asunción de los hechos en otra figura delictiva, no contemplada en un principio por el acusador público.