Jomeini ratifica a Banisadr como jefe del Estado iraní

La mediación personal del imán Jomeini en el conflicto político que enfrenta al presidente iraní, Abolhassan Banisadr, y a los líderes fundamentalitas islámicos, y que había colocado a Irán en la peor crisis política desde el derrocamiento del sha, parece haberse resuelto temporalmente y en una primera fase a favor de Banisadr. Tras las palabras de Jomeini, que anunció la creación de una comisión de tres miembros,encabezada por él mismo, que vigilará los litigios entre ambas facciones, el presidente Banisadr ha sido ratificado como jefe del Estado por el imán, que recordó la obediencia que constitúcionalmente le deben los demás dirigentes políticos, entre los que se cuentan sus principales rivales políticos: el primer ministro, Alí Rayai; el presidente del Parlamento, Hachemi Rafsanjani, y el jefe del Poder Judicial, ayatollah Ahmed Bejesti.

La comisión de tres miembros quedará compuesta por un representante del jefe del Estado y por otro de la «otra parte», según dijo el imán Jomeini, en alusión a los fundamenta listas islámicos, que en las últimas semanas han arreciado en sus críticas contra el presidente Banisadr. La disputa llegó a graves extremos cuando el ayatollah Bejesti, la personalidad con más poder dentro del Partido de la República Islámica, controlado por los fundamentalistas, anunció que las actuaciones de Banisadr podrían llevarle a comparecer ante los tribunales.En el curso de un mitin pronunciado por eljefe del Estado en la Universidad de Teherán la semana pasada, Banisadr ordenó a su guardia personal ka detención de personas que intentaron interrumpir violentamente el acto político. Acto seguido, el diario Engelab Islami, afín a Banisadr, publicaba la lista de los «provocadores y reventadores» deI mitin y quedaba en evidencia su vinculación al sector fundamentalista.

Para el propio Banisadr, la decisión del imán de crear la comisión fortifica la unidad en Irán y deslinda claramente las competencias entre unos y otros. El origen de la polémica, pese a las rivalidades personales y políticas entre fúndamentalistas y laicos, se sitúa también en el articulado de la Constitución de la República Islámica de Irán, en cuyo texto las competencias entre el poder ejecutivo del jefe del Estado y el atribuido a la Jefatura del Gobierno, hoy en manos del fundamentalista Alí Rayai, no quedan suficientemente explicitadas.

Asimismo, Banisadr fue elegido democráticamente por más del 75% de los votos populares, hecho que los observadores consideran decisivo a la hora de interpretar el apoyo continuado de Jomeini a Banisadr, pese a las durísimas presiones de los fundamentalistas islámicos.

De otra parte, ayer se conoció que el Parlamento iraní (Majlis) decidió la nacionalizacíón del comercio exterior del país tras una ronda doble de votaciones. El Gobierno de Teherán dispone a partix de ahora de dos meses para aplicar las modalidades de esta decisión parlamentaria.

En el ámbito militar, un teniente coponel del Ejército del Aire iraní, a quien acompañaba su esposa, decidió el lunes desertar a Turquía a bordo de un avión militar de transporte.