Washington considera decisivo el comportamiento del rey Juan Carlos
"Victoria de la democracia", «Liderazgo del Rey», «Triunfo para el pueblo español» son los términos más repetidos en las reacciones norteamericanas que, de la Casa Blanca a la Prensa, pasando por el Congreso, provocó el insólito intento de golpe de Estado militar, protagonizado por una minoría de miembros de la Guardia Civil.
Destaca, en primer lugar, una llamada telefónica del presidente Ronald Reagan al rey Juan Carlos para felicitarle por el feliz desenlace de los acontecimientos. Durante un cuarto de hora, ambos estadistas conversaron, sin que se tengan informaciones de lo tratado. Es probable que Reagan y, el Rey hablaran también del calendario de la próxima visita real española a EE UU, aplazada desde mediados de febrero debido a la crisis política española.Comunicado oficial
En un comunicado oficial, el portavoz del Departamento de Estado, William Deyss, anunció que «el papel y el liderazgo del rey Juan Carlos fueron fundamentales para resolver la crisis, y merecen una particular admiración ».
«Nos sentimos gratificados por la supervivencia de la democracia española. Hay que destacar que la amenaza contra la democracia española estuvo limitada a un grupo pequeño de personas. La gran mayoría del Ejército y del pueblo español permanecieron fieles a la Constitución y al Rey», dice el comunicado del Departamento de Estado.
«Al igual que todos los amigos y aliados de España, queremos expresar nuestra felicitación por la feliz resolución de la crisis y por la fuerza mostrada por las instituciones y los líderes de la nueva democracia española», expone también el comunicado.
Durante veinticuatro horas seguidas un «grupo especial» siguió la evolución de los acontecimientos en España desde el Departamento de Estado, con línea directa con la Embajada estadounidense en Madrid y con la Embajada de España en Washington.
En énfasis oficial de la Administración Reagan por la salvaguardia de la democracia en España hay que temperarlo, no obstante, con las primeras reacciones pocas horas después de haberse producido el intento de golpe de Estado militar por parte de una minoría en España.
"Asunto interno de España"
«Es un asunto interno», se limitó a comentar lacónicamente Alexander Haig, secretario de Estado norteamericano, cuando la Prensa preguntó, a última hora de la tarde del lunes (medianoche, hora de Madrid) cuál era su reacción ante la crisis. Ni una palabra, ni una alusión, por parte de Haig, al Rey o a la democracia, en un momento en que otros líderes políticos de países democráticos -el propio ministro francés de Asuntos Exteriores, Poncet, desde Washington precisamente- insistían en el apoyo necesario a las instituciones democráticas, la Constitución y la Corona en España.
Llamada de Reagan al Rey
Hay que señalar al mismo tiempo que la llamada telefónica del presidente Ronald Reagan al rey Juan Carlos se produjo a las 10.35 horas del martes (17.35 horas, hora de Madrid), lo que le coloca en los últimos de la lista de los presidentes y líderes políticos occidentales a la hora de «felicitar» a la democracia española.
Por su parte, el senador demócrata Edward Kennedy, uno de los líderes liberales del Congreso y ex candidato a la Presidencia de EE UU en las últimas elecciones, envió un telegrama al rey Juan Carlos en el que «saludo la puesta en libertad de los miembros del Parlamento español y felicito al Rey y al pueblo español por su éxito en mantener y defender la autoridad constitucional en su país».
«Todos los amigos de España», añade Kennedy, «apoyamos firmemente las instituciones democráticas, tan esenciales para el bienestar de esta nación y de toda Europa occidental».
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