Kania: "Nuestra patria socialista corre gran peligro"

«Nuestra patria socialista corre gran peligro», declaró el primer secretario del Partido Obrero Unificado Polaco (POUP, comunista) en el discurso de clausura que pronunció, el lunes por la noche, ante el octavo pleno del comité central de su partido. El texto fue dado a conocer ayer por la mañana.Kania sólo justificó su tono alarmista con unas consideraciones generales sobre el «deterioro de la economía», los riesgos de «paro y penuria», que amenazan a los Polacos, etcétera. A lo largo de su alocución hizo, sin embargo, varias alusiones a los peligros exteriores que correría Polonia si se prolongase la actual crisis.

«Nuestra seguridad nacional y de defensa del socialismo son el patrimonio de toda la comunidad socialista. Polonia es el eslabón débil de la comunidad socialista, y cuando un eslabón falla, toda la comunidad está debilitada. Estas son palabras duras», añadió, «pero hay que comprender que la situación está repleta de amenazas».

El deterioro de la situación interna en Polonia, aseguró Kania, se desarrolla en un contexto internacional que tiende a complicarse. «Se producen huelgas meramente políticas que han paralizado los transportes y comunicaciones del país, comprometiendo así la capacidad de defensa de Polonia».

El máximo dirigente polaco denunció también los lazos existentes entre Solidaridad y «aquellos que quieren derrocar al régimen socialista». «En nombre de Solidaridad», afirmó, «se ataca al socialismo, a las alianzas de Polonia, al partido. Hay personas muy experimentadas que se han adherido a Solidaridad para intentar liquidar al socialismo mediante la contrarrevolución y la anarquía».

«Hay que tener confianza en la madurez de los obreros», declaró Kania, «la contrarrevolución no pasará, vamos a aislar a nuestros enemigos políticos, matar el embrión de la contrarrevolución».

El primer secretario anunció, por otra parte, la «renegociación de los acuerdos concluidos durante el verano con los comités de huelgas de Gdansk, Szszecin y Jastrzebie». A este propósito reconoció las debilidades del Gobierno y del buró político, pero, sobre todo, afirmó que en los acuerdos había «cosas imposibles de llevar a la práctica».

Por último, Kania sostuvo que el POUP tenía que brindar su apoyo a los sindicatos oficiales rivales de Solidaridad.