El PSA pide que el Estatuto de Autonomía prevea conciertos económicos
El Partido Socialista de Andalucía (PSA) propondrá que el Estatuto de Autonomía, actualmente en elaboración, arbitre sendas fórmulas jurídicas para que no se aplique a Andalucía la ley orgánica sobre Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA) y para que, si así se decide en el futuro, pueda reclamarse del Estado la negociación de conciertos económicos.Ambas peticiones fueron formuladas por el secretario de política autonómica del PSA, Salvador Pérez Bueno, durante la entrevista que mantuvo ayer con el presidente de la Junta de Andalucía, Rafael Escuredo, según pudo saber EL PAÍS de fuentes dignas de crédito, que destacaron su convicción de que con estas posiciones nacionalistas se va a producir una nueva brecha de discrepancias y enfrentamientos entre los partidos que participan en la elaboración del Estatuto.
Según portavoces del PSA, la vigencia en Andalucía de la disposición transitoria primera de la LOFCA supondría que la autonomía de esta comunidad no pasará durante seis años de una simple descentralización administrativa o, en palabras textuales, «una gestión periférica de los presupuestos aprobados por el Estado centralista».
En cuanto a la petición de conciertos económicos semejantes a los del País Vasco, las mismas fuentes nacionalistas consideran que Andalucía necesita una financiación especial, «en función de los expolios históricos a que ha sido sometida», para salir del subdesarrollo.
Pérez Bueno aceptó, no obstante, el calendario autonómico propuesto por Escuredo, que prevé la convocatoria por el Gobierno de la asamblea de parlamentarios andaluces antes del 1 de marzo.
Suspendida la asamblea de militantes de Granada
Por otra parte, la comisión permanente del PSA ha decidido suspender la asamblea de militantes de Granada a consecuencia del acuerdo unánimemente adoptado por éstos el pasado sábado, en el sentido de readmitir como miembros de pleno derecho a tres de los dirigentes expulsados del partido por su pertenencia al sector disidente de Rojas Marcos, informa Eduardo Castro.
Se trata del segundo colectivo provincial andalucista que sufre esta medida disciplinaria desde el inicio de la grave crisis interna del partido, después de que la actual dirección tomara, el pasado mes de enero y por idénticos motivos, la misma decisión con respecto a la asamblea del PSA de Huelva.
La suspensión implica que los varios cientos de militantes del PSA granadino no se podrán reunir más en asamblea.
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