Los armadores solicitan represalias
Prácticamente la totalidad de la flota pesquera española que faena habitualmente en los caladeros de la CEE y Marruecos se encuentra ya amarrada en los puertos españoles, mientras que los armadores de las distintas zonas discutían, a últimas horas de ayer, la situación gravísíma que ha planteado la expulsión de nuestros barcos de aquellas aguas; y en un clima de tensión proponían, incluso la adopción de medidas de represalia.Los armadores con base en el puerto de Las Palmas enviaron ayer un telex al Ministerio de Agricultura en el que, entre otras cuestiones, solicitaban la expulsión de los pesqueros marroquíes de los puertos españoles hasta que se llegue a un nuevo acuerdo con aquel país, y de los marineros marroquíes que están enrolados en nuestra flota, según informó el servicio empresarial de noticias.
A lo largo de toda la jornada representantes de la Administración analizaron esta grave crisis y las posibles soluciones. El vicepresidente del Gobierno para Asuntos Económicos, Leopoldo Calvo Sotelo, se reunió en la mañana de ayer con el titular de Exteriores, Pérez-Llorca, el ministro de Agricultura y Pesca, Lamo de Espinosa, el de Economía y Comercio, García Díez, y el de Relaciones con la CEE, Eduardo Punset. A esta reunión asistió también el secretario de Estado para Asuntos Exteriores, Robles Piquer, que ha llevado las últimas negociaciones con Marruecos; el subsecretario de Pesca, Miguel Adasoro, y el director general de Exportación, Juan Arenas. En la tarde de ayer, por otra parte, habían sido convocados a Madrid, con urgencia -pese a las dificultades del tráfico aéreo derivadas de la huelga del personal de Iberia-, distintos armadores.
«El tiempo se ha encargado de desencadenar todos los problemas de la pesca que subyacían y que no tenían un tratamiento ni una planificación debida por parte de la Administración. Es decir, que la desestabilización que tenemos ahora en todos los frentes es una consecuencia de los aplazamientos que se han venido produciendo, con prórrogas de acuerdos, pero sin buscar las salidas oportunas», declaró a Efe el director de la cooperativa de armadores viguesa. Esta sensación de haberse perdido mucho tiempo en la resolución definitiva del problema pesquero, planteado de forma generalizada desde 1976, era compartida ayer por los armadores españoles de las distintas zonas pesqueras.
