Otra vez los controladores
( ... ) Los controladores aéreos españoles están en estos momentos en «huelga de celo», es decir, en fase de máxima escrupulosidad, ateniéndose -para que no haya sanciones que impidan el eventual fracaso de sus "revisiones"- al reglamento. Conocemos, desgraciadamente, la estrofa siguiente de esta canción que repercute negativamente en las vidas y haciendas de miles depersoinas. Después de un forcejeo más o menos largo, dotado de una mayor o menor intensidad, según el grado de conflictividad a que dé lugar el racionamiento caprichoso de los vuelos sobre nuestro espacio aéreo, los controladores lograrán su revisión y volverán a sus pantallas sin acordarse de ese reglamento por lo menos hasta el verano.Ya es hora de que se instauren otros mecanismos -y otras seguridades- para la ordenación del tráfico aéreo. Quizá haya llegado el momento de reformar el reglamento que marca, al parecer, que en lugar de dar salida a un avión cada tres minutos, que es la cadencia habitual en Barajas, sólo salga un aparato cada veinte minutos. Lo cierto es que las «soluciones» parciales dadas a los conflictos anteriores no han servido para asegurar nada que no fueran los emolumentos de los controladores. Si ellos tienen derecho a la huelga, los usuarios -y en su representación, la Administración- deben contar también con algún mecanismo de respuesta.
28 de enero