El PC polaco busca un compromiso con Walesa en torno a los sábados libres

El partido comunista polaco (POUP), mostrando su disposición al diálogo, se ha declarado dispuesto a negociar con el sindicato independiente Solidaridad el tema de la semana de cinco días, cuya introducción debe hacerse paulatinamente a lo largo del presente año, según lo pactado el pasado otoño.Así lo afirmó un portavoz del POUP tras finalizar la reunión plenaria especial convocada el lunes para analizar el paro generalizado del pasado sábado, obedeciendo las consignas de Solidaridad, partidaria de librar todos los sábados en vez de sábados alternos, como propone el Gobierno.

Mientras tanto, ha vuelto al primer plano de la actualidad polaca la cuestión de la libre sindicación de los campesinos, que están siendo secundados por huelgas de advertencia, de cuatro horas de duración, en diversas regiones del país, en apoyo de Solidaridad Campesina, rama agraria del sindicato de Lech Walesa.

De hecho, la disposición de las autoridades al diálogo, virtualmente roto la semana pasada tras el encuentro entre Walesa y el primer ministro, Josef Pinkowski, se ve enturbiada por la situación en el campo.

Además de los paros de advertencia de ayer en las regiones de Bielsko-Biala, Bialystok y Lodz, para hoy están anunciadas por Solidaridad manifestaciones en apoyo del sindicato libre de agricultores. El apoyo se concretará en el engalanamiento de los lugares de trabajo con la bandera nacional (roja y blanca), la misma que tiene el sindicato Solidaridad, y en mítines en favor del sindicato de agricultores.

En la región de Rzeszow, al sureste de Varsovia, se concentran las reivindicaciones campesinas más radicales, hasta el punto que ayer el propio Walesa y otros dirigentes de Solidaridad se presentaron en esta ciudad para negociar con los agricultores, que desde hace tres semanas están encerrados en los locales de los antiguos sindicatos oficiales, y quienes han lanzado un llamamiento para la huelga «sin límites» a partir de hoy, en tanto no se legalice Solidaridad Campesina. La comisión coordinadora nacional (presidencia colegiada) de Solidaridad envió a los sindicatos regionales la orden de que ninguna huelga debe celebrarse antes del día 3 de febrero.

El Buró Político del POUP, recogiendo la decisión del Comité Central del partido, informó en la noche del lunes al Gobierno que reemprendiese el diálogo con Solidaridad a fin de que la situación económica no siga empeorando. La jornada de huelga de hecho del sábado costó al país, según datos oficiales, unos 12.000 millones de pesetas.

Por otra parte, el órgano teórico mensual del POUP, Nowe Drogi, publicó ayer la carta del ex primer secretario Edvard Gierek al partido el pasado 1 de diciembre, en la que acepta parte de las responsabilidades de la actual crisis polaca, pero en ningún momento llega a profundizar en las causas y se remite a explicar que lo que hizo (en particular, una aceleración del proceso de industrialización.