Francia hará grandes negocios con Marruecos en el terreno nuclear y los fosfatos

El estudio del proyecto de construcción de una central nuclear, encomendado por Marruecos a Francia, y la participación francesa en el desarrollo del sector de los fosfatos -la mitad de la economía marroquí- son los resultados más espectaculares, aunque no únicos, de la visita oficial de cuatro días a Marruecos del primer ministro francés, Raymond Barre, finalizada ayer.Este viaje, calificado de rutinario en un principio por fuentes francesas, ha tenido como resultado además la promesa de Marruecos de modificar en breve plazo su código de inversiones para crear «el clima de recepción adecuado» solicitado por los posibles inversionistas franceses.

En el caso de la central nuclear, el ministro francés de Comercio, Michel Cointat, que acompañó a Raymond Barre en este viaje, dijo que se trataba del estudio del proyecto de construcción de una central nuclear como parte del programa energético marroquí.

Asimismo se ha creado un grupo de trabajo, según el comunicado final de la visita, que debe comenzar de inmediato el estudio de los proyectos de desarrollo de la Oficina Marroquí de Fosfatos, el organismo estatal responsable de este sector, que representa el 50% de los ingresos, que analizará los planes de financiación de esta entidad con vistas a una participación francesa.

Entre las contrapartidas ofrecidas por Francia a las concesiones obtenidas de Marruecos, el primer ministro, Raymond Barre, ha prometido sobre todo ayuda a «las legítimas preocupaciones de Marruecos ante la segunda ampliación de la CEE».

El primer ministro francés dijo en su conferencia de Prensa que a iniciativa de Francia la CEE ha iniciado un período de reflexión sobre las incidencias de esta segunda ampliación para los países del Magreb, ampliación que, precisó Barre, «como en el caso de España, no puede dejar de tener consecuencias para Marruecos».

Los periodistas marroquíes intentaron a lo largo de la conferencia de Prensa obtener mayores precisiones de la actitud francesa con respecto al conflicto del Sahara y hablaron de la «necesidad de una mediación francesa en apoyo de las tesis marroquíes».