La aviación israelí derriba dos Mig sirios

Dos Mig-21 sirios fueron derribados el miércoles por la tarde por la aviación israelí, en el sur de Líbano, según anunció un portavoz militar israelí, quien precisó que todos los aparatos de las fuerzas aéreas hebreas habían regresado a sus bases sin sufrir ningún desperfecto.Inmediatamente después de este anuncio, un portavoz militar sirio afirmó, en Damasco, que dos aviones israelíes habían sido derribados, al tiempo que reconocía que dos aparatos sirios habían sido alcanzados por las fuerzas armadas enemigas en el combate aéreo.

Fuentes oficiales en Beirut confirmaron que dos aviones sirios habían sido derribados por caza-bombarderos israelíes. Las fuerzas de seguridad libanesas precisaron también que los dos pilotos sirios lograron saltar en paracaídas. Ninguna fuente libanesa confirmó el derribo, anunciado por Damasco, de dos aviones israelíes.

Según los militares israelíes, la aviación hebrea bombardeaba en el sur de Líbano bases de guerrilleros palestinos cuando los caza sirios intervinieron. El combate se desarrolló a ocho kilómetros al oeste de Metulla, en el noreste de Galilea, indican las mismas fuentes. Los militares israelíes precisan que nunca los aparatos sirios se han acercado tanto a las fronteras de Israel.

Esta intervención siria se produce después de las declaraciones del presidente sirio, Hafez el Assad, quien. a finales de agosto subrayó que Siria defendería también el espacio aéreo de Líbano. El 24 de agosto, un Mig -21 sirio, que trató de interceptar cerca de Sidón a un avión de reconocimiento israelí, fue derribado. Desde entonces no se había registrado ningún combate entre aviones sirios e israelíes.

Los círculos militares israelíes opinan que no se trata de un -incidente aislado, sino más bien de -una prueba tangible del endurecimiento de la política del presidente Assad respecto a Líbano. Con anterioridad, el 20 de diciembre, las tropas sirias instaladas permanentemente en Líbano bombardearon el enclave cristiano de Zahleh. Este bombardeo constituyó una represalia a un ataque terrestre israelí contra bases de guerrilleros palestinos.

Según los observadores israelíes, el jefe del Estado sirio se esfuerza por brindar todo su respaldo a la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) y trata de impedir, al mismo tiempo, que Jordania, aliada incondicional de Irak, se sume a las negociaciones entre Egipto, Israel y Estados Unidos sobre el porvenir de Cisjordania y Gaza.

El presidente Assad acaba de reiterar su oposición a la llamada «Opción jordana», que los laboristas israelíes preconizan, y su apoyo a la creación de un Estado palestino independiente.

Los observadores prevén nuevos choques en la frontera norte de Israel, aunque descartan rotundamente un enfrentamiento generalizado, que ni Damasco ni Tel Aviv parecen desear.