Garaikoetxea valora positivamente el acuerdo sobre policías autónomas

El reconocimiento de las competencias exclusivas de la comunidad autónoma en materia de tráfico, acordado en el Consejo de Ministros celebrado el lunes, fue valorado positivamente por el presidente del Gobierno autónomo, Carlos Garalkoetxea. Sin embargo, el lendakari, momentos antes de reunirse con su Gabinete, manifestó ayer a EL PAIS su preocupación por el estado de las negociaciones en torno a los conciertos económicos, ya que «la ordenación de la Hacienda vasca es algo más que un traspaso y, por tanto, el camino hacia un acuerdo definitivo está resultando lento y difícil».

El compromiso de creación de los contingentes iniciales de la policía vasca en un plazo aproximado de seis meses y la previsión de que la Junta de Seguridad, de inminente creación, se encargue de deslindar progresivamente otras materias dependientes de la Jefatura de Tráfico, era motivo de congratulación en medios próximos al Gobierno vasco. No obstante, el presidente Carlos Garaikoetxea, que aseguraba no haber recibido, antes de iniciar la mencionada reunión, la redacción formal de los acuerdos del Consejo de Ministros, se mostraba cauteloso a la hora de comentar las concreciones de los mencionados traspasos de competencias.

"Han sido respetadas las condiciones del Gobierno vasco"

«Mi impresión era satisfactoria, porque, al parecer, han sido respetadas las condiciones de los representantes del Gobierno vasco», dijo el lendakari. En relación a la posibilidad de que tras las reuniones mantenidas en el seno de la comisión mixta de transferencias se hubiera podido concretar la exclusividad de algún otro servicio contemplado en el artículo 17 del Estatuto de Guernica, Carlos Garaikoetxea declaró: «El Gobierno vasco hubiera deseado apurar alguna concreción más. Pero somos realistas y sabemos que el tema es muy complejo. De todas formas, el haber sentado el principio de que la Junta de Seguridad irá desarrollando los servicios correspondientes es un paso adelante».El presidente del Gobierno vasco se mostraba muy preocupado por el lento ritmo de las discusiones en relación al tema de los conciertos económicos. A pesar de que los negociadores están a punto de concretar un acuerdo en la fijación de un cupo provisional para 1981, el principal obstáculo reside en la creación de una ley normativa.