Despolitización en las cofradías sevillanas

En el futuro las hermandades y cofradías sevillanas no podrán conferir cargos honoríficos ni otras distinciones, salvo las que expresen reconocimiento de un largo servicio en el seno de las mismas, «con el mayor espíritu de sencillez y austeridad». Así se dispone en el decreto firmado por el cardenal arzobispo de Sevilla, José María Bueno Monreal, sobre las normas que habrán de regir en adelante la vida y actividades de estas instituciones sociorreligiosas.

Esta orden tiende a evitar la proliferación de las concesiones de títulos de hermano mayor honorífico y otros semejantes por motivos claramente extrarreligiosos. También se dispone que las representaciones oficiales de las hermandades se abstengan de asistir a actos y actividades de cualquier matiz político.

El decreto promulgado por Bueno Monreal, que sustituye a las normas de 1975 y tendrá vigor en toda la archidiócesis hispalense, rebaja a dieciocho años la edad exigida para poder ser elector y elegible en una hermandad y establece cuatro condiciones para poder ser candidato a hermano mayor: ser mayor de treinta años, cinco años de antigüedad en la cofradía, probado sentido cristiano y eclesiástico e incompatibilidad con cualquier cargo político o funciones de gobierno de ningún ámbito territorial.