Aplazada al lunes la rescisión del arrendamiento de Las Ventas

La representación del Consejo Taurino de la Diputación de Madrid comunicó ayer oficialmente a los miembros de Taurina Hispalense, SA, su decisión de rescindir el contrato de arrendamiento de Las Ventas en base a incumplimientos del pliego de condiciones. Taurina Hispalense respondió que, a su entender, no hay razón jurídica para la rescisión y pidió a los diputados que se aplazara unos días la decisión final, para que hubiera un margen de reflexión por ambas partes. Esta especie de respiro fue aceptada por la Diputación y se fijó para el lunes una nueva y última reunión.

Por parte de la Diputación asistieron a la reunión de ayer el vicepresidente de la Corporación y miembro del Consejo Taurino, Luis Larroque; presidente de este órgano, Joaquín Tejeiro, y gerente, Agustín Marañón. Por parte de Taurina Hispalense, el presidente, Miguel Sánchez Flor; consejeros delegados, José Luis Martín Berrocal y Diodoro Canorea; secretario, Trinidad Cantos, y varios socios. Las conversaciones se desarrollaron a lo largo de dos horas, en un ambiente de cortesía, dentro de los opuestos criterios.La Diputación expuso que se rescinde el contrato por varios incumplimientos, principalmente la subida del precio de localidades por encima del 35% autorizado y la existencia de un subarriendo inconsentido, del que hay prueba documental. Este subarriendo es el que hizo Canorea, adjudicatario de la plaza, a Taurina Hispalense en la temporada de 1979. La demostración de su existencia rompe las argumentaciones de Berrocal, según las cuales la sociedad no estaba obligada a hacer ahora la ampliación de capital (otro incumplimiento), pues empezó sus operaciones en marzo de 1980 (que empezaron a principios de 1979 está comprobado).

Las causas de rescisión a su vez apoyan la decisión política de la Corporación, apoyada unánimemente por todos los partidos sin excepción y adoptado hace un mes, de conseguir mediante nuevo concurso de explotación del coso que la fiesta de toros en Madrid tenga el contenido que desean los aficionados, y Las Ventas recupere la categoría preeminente que ha perdido.

Los socios de Taurina Hispalense se mostraron en la reunión unidos -a pesar de que habían trascendido las tensiones internas de la sociedad- y manifestaron su deseo de continuar con la explotación de la plaza, que consideran rentable a largo plazo, aun con las condiciones de arrendamiento que rigen actualmente. Pero los diputados se mostraron firmes en su decisión de rescindir el contrato, no obstante ofrecer la posibilidad de que se haga sin perjuicio económico para ninguna de las partes. La fórmula podría ser la renuncia expresa de Taurina Hispalense a continuar con Las Ventas. Quedó claro que la postura de la Diputación no variará en la reunión del próximo lunes.