No había alarma automática.
A 85 muertes y más de quinientos heridos ascendía ayer el balance del incendio en el hotel MGM, de Las Vegas(EE UU), en el que quedó destruido este hotel-casino de veintiséis pisos. Según el jefe de bomberos de esta ciudad, Roy Parrish, la carencia de un sistema de alarma automático en el hotel, como es obligatorio en EE UU desde 1975, provocó «el abultado número de víctimas». De acuerdo con las primeras investigaciones, un cortocircuito en una de las máquinas de la primera planta originó el incendio. Entre los centenares de heridos, todos rescatados por helicópteros, al igual que las personas ilesas, más de 4.000, la mayor parte padece esiones por asfixia, y otros, contusiones a consecuencia de los atropellos al querer huir de las llamas hacia la terraza para ser evacuados. Los bomberos, como muestra la foto, trabajaban aún ayer en la extinción de los últimos rescoldos.
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