El Consejo de Europa quiere reforzar la cooperación antiterrorista

La Conferencia del Consejo de Europa sobre terrorismo ha concluido con el propósito de reforzar la cooperación entre los veintiún países miembros.Los parlamentarios y otros representantes de «los 21» condenaron el terrorismo, cualquiera que sea su origen o ideología, y acordaron ampliar y reforzar la cooperación, en particular entre los países limítrofes, que permita tomar medidas eficaces.

Esta intensificación de la cooperación europea concede prioridad a la simplificación y aceleración de las medidas existentes en la lucha contra el terrorismo.

Asimismo se acelerará la comunicación de informaciones entre los Estados sobre las circunstancias en las que se ha cometido un acto terrorista y el procedimiento judicial, penas y sanciones contra los autores.

Al término de los trabajos, el Consejo de Europa ha tomado conciencia de la responsabilidad que le incumbe para defender la democracia contra la violencia terrorista, conforme a los principios estipulados en el convenio europeo para la represión del terrorismo de enero de 1977.

En virtud de dicho convenio, no se consideran delitos políticos los que atentan contra la vida de las personas, los secuestros y tomas de rehenes y los actos realizados con armas de fuego y explosivos, que justifican la extradición.

Los resultados de la conferencia permitirán elaborar un informe y un proyecto de resolución que se someterá al voto de la Asamblea parlamentaria del Consejo de Europa, en su sesión plenaria del próximo enero.

En la sesión de la mañana, el senador vasco español Alfredo Marco Tabar (Unión de Centro Democrático), calificó de «inamistosa» la postura del Gobierno francés frente a España y denunció la «permisibilidad» francesa al dejar entrenarse impunemente, en su territorio, a los terroristas vascos de ETA.

Tras pedir disculpas por «saltarse,» las normas a que le obligaría la hospitalidad francesa, el parlamentario vasco acusó al Gobierno galo por su falta de solidaridad: «Francia permite que su territorio sea utilizado, no ya como base de, asilo político, sino como base de acción de la organización terrorista ETA».