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Secuestrado y asesinado anoche un abogado de San Sebastián

Tres nuevos actos terroristas, con un triste balance de dos muertes, se produjeron ayer en Guipúzcoa, contra un miembro del comité ejecutivo provincial de UCD, Juan de Dios Doval; un abogado criminalista, José María Pérez de Orueta, y un obrero metalúrgico, Enrique Aguirre. Los dos primeros resultaron muertos y el segundo herido de gravedad. ETApm ha reivindicado el primer atentado, tratando de justificar el asesinato en base a que Doval era «el máximo teorizador» del empleo del batallón Vasco Español.

ETApm añade, en el comunicado difundido tras el asesinato del dirigente centrista, que en el País Vasco se ha llegado a un «grave retroceso de las libertades». A su vez, ETA Militar ha hecho llegar a los medios informativos otro comunicado, en el que reivindica el asesinato de Juan Carlos Fernández Azpiazu, empleado de la Telefónica. Los terroristas dicen que éste era un supuesto traficante de heroína que, según los asesinos, «le facilitaba la policía».Horas después, dos jóvenes se presentaban, a las siete de la tarde de ayer, en el domicilio del abogado donostiarra José María Pérez de Orueta, y comunicaban a su madre que le esperarían, porque tenían una cita con él. Cuando llegó el abogado, le secuestraron a punta de pistola, no sin antes cortar los hilos del teléfono. Alrededor de las diez de la noche de ayer, una voz anónima comunicaba al diario Egin el lugar exacto donde se encontraba el cadáver de una persona, a la que previamente habían interrogado. La policía encontraría, a primera hora de la madrugada de hoy, el cuerpo sin vida del citado abogado, en el barrio de Erezoñu, de Hernani. La víctima no tenía vinculación política conocida, contaba treinta años de edad, era soltero y se dedicaba a defender a delincuentes comunes.

La trágica situación que vive Euskadi ha provocado un sentimiento unánime de condena. Desde la aparición en la televisión del lendakari Garaikoetxea hasta la decisión de convocar una manifestación conjunta (PNV, UCD, PSOE y PCE) para protestar por el terrorismo, el próximo domingo en San Sebastián.

El Comité Ejecutivo de UCD, por su parte, difundió anoche un comunicado en el que afirmaba: «Ante este hecho, UCD reafirma su irrenunciable presencia en el País Vasco y su voluntad decidida de seguir colaborando con cuantos rechazan de forma absoluta la violencia y desean el bienestar del País Vasco».

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