Mariano Nicolás: "El orden público ha mejorado sensiblemente en Madrid"

«La detención de algunas bandas de delincuentes bastante conocidas y las acciones monográficas realizadas por la policía han supuesto que el orden público no haya empeorado durante los tres meses que llevo al frente del Gobierno Civil. Es más, creo que ha mejorado sensiblemente. Este es uno de los logros que Mariano Nicolás, gobernador civil de la provincia, declara haber conseguido en la ciudad cuando se van a cumplir los primeros cien días de su gestión.

Mariano Nicolás llegó al Gobierno Civil de Madrid en julio de este año. Nacido en Cartagena, en 1932, y licenciado en Derecho, desempeñó el mismo cargo que ahora ocupa en las provincias de Cuenca, Santa Cruz de Tenerife, Alicante, Córdoba y Valencia. Posteriormente fue director general de Seguridad y delegado del Gobierno en la Telefónica. Actualmente afiliado a UCD, fue secretario nacional del SEU y se le considera hombre de confianza de Juan José Rosón,Sobre sus primeros cien días al frente del Gobierno Civil de Madrid, afirmó que los ha dedicado sobre todo a estudiar los distintos problemas, a través de múltiples entrevistas con partidos; políticos, entidades vecinales, delegados provinciales, concejales y alcaldes de las corporaciones locales.

«Lo que he visto muy claro es que el Gobierno Civil es un cajón de sastre en el que se plantean toda clase de temas. Desde la dimisión de un concejal hasta la contaminación del agua o la subida del pan. Las visitas que recibo al cabo del día son incontables. Ahora, desde este verano, ha habido temas concretos que me han ocupado especialmente. Los incendios forestales ha sido un tema de preocupación constante todo el verano y luego, entre subidas de taxis y pan, hemos llegado a un comienzo del curso escolar que ha podido ser conflictivo en la provincia, porque hay que reconocer que las previsiones de disponibilidad de plazas escolares no se han cumplido».

Dentro de estos conflictos de carácter cotidiano, destaca ahora el tema de la contaminación ambiental. El Ayuntamiento se reunirá mañana, lunes, para estudiar las medidas a tomar. Sin embargo, estas medidas no tendrán validez si no son ratificadas por el gobernador. «Hasta el momento, ningún representante del Ayuntamiento me ha dicho nada acerca del traslado de competencias en este asunto, pero es un problema en el que tendrían que decidir más personas. Por el momento, hay ya unas normas del pasado año que siguen en vigor, y que se aplicarán en el momento en que se llegue a los topes de peligrosidad establecidos».

Orden público

Para Mariano Nicolás, el orden público de Madrid es una preocupación permanente, y parte del supuesto de que los tres millones largos de habitantes de esta ciudad originan de por sí una convivencia problemática. «En estos momentos, puedo asegurar que la situación no ha empeorado respecto a épocas anteriores. Llevamos unos días tranquilos, aunque tampoco me atrevo a decir que la situación haya mejorado. En este ambiente de calma influye la detención de una serie de bandas muy activas, y que mientras están en la cárcel, disminuyen sistemáticamente los atracos y sucesos semejantes. Además, dado que la presencia policial en todas partes es imposible por falta de recursos humanos, actuamos de manera monográfica. Es decir, que un día trabajamos contra la pornografía, otro desplegamos nuestros esfuerzos en zonas donde el tráfico de drogas está en alza, otro, se dedica una especial vigilancia a bancos, farmacias, loterías y quinielas, o cualquier otro punto que sea blanco frecuente de la delincuencia. Y este sistema creo que está dando buenos resultados».Con el Ayuntamiento madrileño, Mariano Nicolás asegura que no ha tenido el menor motivo de desacuerdo. «Mantengo frecuentes contactos con concejales o delegados e incluso con el mismo alcalde, y la colaboración es total. En cuanto a la provincia, raro es el día que no viene a visitarme alguno de los 178 alcaldes de los pueblos madrileños. Plantean temas de vivienda, orden público e incluso diferencias entre distintos miembros de la corporación. Solamente en algún Ayuntamiento, como en Alcalá de Henares, llegamos a una situación tirante por la muerte del grapo España Vivas. A veces he tenido que suspender acuerdos porque la corporación había hecho una incorrecta interpretación de la legislación. Han sido asuntos más de forma que de fondo».