Vuelven las manifestaciones vecinales en petición de vivienda

Las manifestaciones ciudadanas en reivindicación de una pronta terminación y al mejor precio posible de las viviendas de los barrios en remodelación han vuelto a hacer su aparición cuando parece acercarse el momento de la entrega de las primeras, y a los pocos días del nombramiento de un nuevo delegado provincial de Obras Públicas y Urbanismo. A las primeras concentraciones protagonizadas por los vecinos del Zofío y de Orcasitas se unió la que ayer realizaron los del Pozo del Tío Raimundo, frente a la delegación ministerial.

Una manifestación de cerca de quinientos vecinos del Pozo del Tío Raimundo se congregó ayer por la mañana frente a la sede de la delegación provincial del Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo, en la calle de la Basílica, con la intención de presionar a su titular recién nombrado, Alvaro Perea, para que recibiese a una comisión con la que discutir sus actuales problemas.Los puntos conflictivos son los relativos a que el ministerio pague una cantidad global y general a todos los afectados, en concepto de traslado y no el 5% del dinero que cada uno haya recibido por la expropiación de la vivienda donde ahora vive, lo que equivalía a decir que le costaba más la mudanza a quien tuviera una vivienda con más metros cuadrados; el precio de compra de la nueva vivienda y que se aplicara el que ahora rige, con independencia de que la vivienda le pudiera ser entregada cuando hubiera subido de precio, y la instauración de una subvención a fondo perdido igual para todos, y no -como estaba estipulado hasta ahora- a criterio del ministerio, en función de la situación económica de cada familia.

El acuerdo parcial al que se llegó entre vecinos y delegado fue la firma de un acta de la neunión, por parte de éste, en la que se incluye el reconocimiento de la inquietud mostrada por la asociación ciudadana y la promesa de encontrar una solución para antes del día 17. Los vecinos, por su parte, celebrarán una asamblea el día 19, en la que decidirán si aceptan o no las propuestas, que, en su caso, les haga la delegación.

Con la manifestación de ayer, ya son tres los barrios que se han echado a la calle cuando faltan pocas semanas para que comience la entrega de viviendas y coincidiendo con la llegada a la delegación del MOPU en Madrid de un nuevo delegado. Los vecinos, organizados en una coordinadora que agrupa a los veintiocho barrios afectados por las obras de remodelación, mostraron su opinión contraria a que el antiguo delegado, José Luis Mas, fuera sustituido, toda vez que fue el primero de los que han ocupado ese cargo en los últimos años que les hizo caso.