Clamor en Francia contra el renacimiento fascista
En un clima de emoción nacional tras el atentado racista contra los judíos del viernes por la noche, el presidente de la República, el Gobierno y los responsables policiales son denunciados ferozmente por su «debilidad» frente al neonazismo. La policía ha interrogado a trece personas de extrema derecha, pero se desconoce todo sobre los autores del crimen y sobre las fuerzas que los respaldan.
Según el balance final, la explosión en la sinagoga judía del distrito número dieciséis ocasionó tres muertos y veinte heridos. A lo largo del día de ayer, Francia se levantó, como una sola persona, contra lo que se considera el renacimiento cierto del fascismo. Y no sólo en Francia. Los devastadores atentados de Bolonia, en agosto, y de Munich, en septiembre, se suman ahora al de París. Las técnicas similares y la naturaleza de los atentados hacen sospechar incluso a los analistas más meticulosos en que hablar de la Internacional negra ya no resulta exagerado.Las autoridades israelíes de Francia, como el primer ministro de Israel, Menájem Beguin, de igual manera que los responsables políticos, los sindicales y la Prensa, acusan al Gobierno de «incapacidad».
«El Estado ha sido afectado por su debilidad con quienes amenazan sus libertades», anotaba el vespertino Le Monde, que solicitaba del Gobierno: « Una de dos, o encuentra a los asesinos o dimite». La tolerancia de las autoridades y de la policía con los medios de extrema derecha, que ya vienen actuando desde hace varios meses, indigna a todos los franceses. Se recuerda que no faltaban fascistas en el servicio de orden del presidente en 1974.
