_
_
_
_
COMUNICACION

Posturas contradictorias sobre la comunicación en la conferencia de la Unesco en Belgrado

Criterios diversos y a veces contradictorios sobre la comunicación, en general, y sobre el papel de los periodistas y de sus organizaciones profesionales en el tratamiento de la noticia, en particular, se están manifestando en la 21º Conferencia General de la Unesco, que se celebra actualmente en Belgrado, y que tiene como tema monográfico el estudio del informe final sobre la comunicación, redactado en los últimos meses por la Comisión Internacional de Estudio de los Problemas de la Comunicación.Dicha comisión, formada a raíz de celebrarse la 19, Conferencia General de la Unesco, está integrada por dieciséis expertos en información de diversos países y su misión ha sido examinar globalmente el papel, las finalidades y las condiciones de la comunicación. El informe de la comisión, conocido por el informe MacBride, por el nombre de quien la preside, consta de cinco partes, cuatro de ellas de carácter esencialmente descriptivo y analítico, mientras que la quinta recoge las conclusiones y recomendaciones que la comisión formuló por unanimidad o que algunos de sus miembros consideraron oportuno presentar.

Merced al citado informe -se pone de manifiesto por los expertos de la comunicación-, la comunidad internacional dispone ahora de un documento en que se reúnen los datos esenciales sobre los problemas de la comunicación, que pueden ayudar a reflexionar más a fondo sobre las dificultades.

En el discurso de presentación del informe MacBride, el director general de la Unesco, Amadau-Mahtar M'Bow, llamó la atención sobre el desequilibrio y la desigualdad que existen en la circulación de la información entre las naciones desarrolladas y en desarrollo, y sobre el papel que pueden desempeñar los medios de comunicación de masas en el progreso de la educación, de la ciencia y de la cultura, así como en el desarrollo de las naciones.

El director general de la Unesco cuyo discurso pareció no agradar demasiado a los representantes de los Gobiernos y a las asociaciones periodísticas occidentales, se pronunció contra la circulación verti cal de las informaciones, ya que éstas «sólo pueden engendrar una comunicación sin reciprocidad, sin respuestas, ni intercambio.

El llamado informe MacBride supone, a juicio de los observadores occidentales, un rudo golpe a los principios clásicos de la libertad de expresión, tal y como se vienen predicando en las democracias, y una amenaza global para la libertad de Prensa, al facilitar la intervención de los Gobiernos sobre los medios, so pretexto del desarrollo cultural de los países.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_