El Ejército iraquí tiene poca experiencia
El Ejército iraquí, a pesar de que se ha curtido durante doce años de campaña contra los levantamientos kurdos, tiene una experiencia muy limitada en la guerra clásica, ya que su participación sobre el terreno en tres de los cuatro conflictos árabe-israelíes ha sido sólo marginal.Sin embargo, su capacidad operacional se considera como una de las más desarrolladas del mundo árabe, junto con la del Ejército jordano. A partir de la instauración de la república en 1958, pasó de una orientación británica a una soviética, tanto por su armamento como por su formación, aunque ha mantenido en el cuerpo de oficiales, una gran dosis de las tradiciones heredadas de la época colonial y de la academia de Sandhurst, con la cual la ruptura no es total.
Aunque ha participado en diversos golpes de Estado, el Ejército iraquí se mantiene bien estructurado.
El régimen baasista, instaurado tras un golpe militar, reforzó considerable mente los efectivos humanos y el armamento. Pasó a tener 190.000 hombres en el Ejército de Tierra, en 1979, contra 70.000 que había en 1968. El del ,Aire pasó de 10.000 a 28.000, en 1978 y en el mismo año, la Marina pudo contar con 4.000 hombres.»
El presidente Saddam Hussein, que tiene el cargo de comandante en jefe del Ejército, por ser jefe de Estado, aunque ni siquiera es oficial, ya que llegó al poder mediante un golpe de Estado, se ha preocupado por fortalecer al Ejército, continuando la obra de su predecesor, el presidente Ahmed Hassan al Bakr, y tras la dimisión de éste, en julio de 1979, a través de su cuñado, Adnan Jairallah, a quien confió el Ministerio de Defensa, y de su propio hermano, Barazan Hussein, jefe-adjunto de Información.
A pesar d e que la mayoría de la población es chiita (un 60%), entre los oficiales hay una gran mayoría sunnita (los sunnitas representan sólo el 25 % de la población).
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