Silos blindados conectados con la Casa Blanca
Los misiles intercontinentales norteamericanos Titan II están depositados permanentemente en silos subterráneos blindados. La explosión se produjo justamente en uno de estos silos a consecuencia de un accidente de mantenimiento que provocó un escape de carburante del misil.Estos silos, que tienen la apariencia de pozos verticales de cemento, se cierran mediante una puerta corrediza de acero y cemento. Estas puertas están previstas para resistir los efectos de una explosión nuclear que se produzca en las proximidades.
El pozo está unido por un túnel con un centro de control subterráneo en el que se encuentran permanentemente dos oficiales y cuatro soldados, ecargados de ejecutar la orden del presidente de EE UU de disparar el misil con su ojiva nuclear de cinco o 7,5 megatoneladas. Normalmente, nadie permanece de forma permanente en el silo.
Un dispositivo de plataformas permite acceder a los diferentes pisos del misil cuando un equipo de mantenimiento necesita llevar a cabo alguna operación. Desde una de estas plataformas se le cayó a un técnico un objeto pesado (una llave de 1,5 kilogramos), que perforó, veinte metro más abajo, el depósito de carburante, a presión, del misil.
Cuando los aparatos del centro de control subterráneo registraron el incendio, los depósitos de agua que rodean el silo fueron abiertos y éste quedó inundado.
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