Las relaciones soviético- iraníes, a un paso de la ruptura
El ministro iraní de Asuntos Exteriores, Sadegh Gotbzadeh, ha dirigido una carta a su homólogo soviético, Andrei Gromiko, en la que le reprocha las constantes provocaciones que la Unión Soviética está realizando en las diferentes fronteras de Irán.Esta carta se inscribe en la gran crisis que están sufriendo las relaciones soviético-iraníes, que se han visto agravadas en la última semana. La carta de Gotbzadeh a Gromiko, fechada el 12 de agosto, ha seguido a la amenaza de retirar al embajador iraní en Moscú, si la URSS no suspende su ayuda militar a Irak.
En este sentido, el imán Jomeini pronunció un discurso el sábado pasado, en que, por primera vez, calificaba a la Unión Soviética de «gran potencia satánica».
Por otra parte, el Gobierno de Teherán también está teniendo problemas con Gran Bretaña, debido a la detención de tres misioneros anglicanos en Irán. El arzobispo de Canterbury, primado de la Iglesia inglesa, envió ayer un mensaje a Jomeini, preocupándose por los detenidos.
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