Funeral en Amurrio por el militante de UGT asesinado

A las ocho de la tarde de ayer dio comienzo, en la iglesia parroquial de Santa María, de Amurrio, el funeral de cuerpo presente de Joaquín Becerra Clavete, militante de UGT que inmigró a la villa alavesa hace veintitrés años desde su pueblo natal de Cortes de la Frontera (Cádiz), que fue asesinado a últimas horas de la noche del miércoles. Diversos autocares de afiliados a UGT y militantes del PSOE llegaron al pueblo poco antes del funeral, cuya hora fue retrasada precisamente para que estas personas pudieran acudir al acto desde Bilbao y San Sebastián.Hasta la hora del funeral, el día había transcurrido con normalidad en la villa de Amurrio, situada en la cuenca alta del río Nervión, aunque en territorio alavés. Fue el jueves cuando la noticia del asesinato originó el paro de la fábrica Tubos del Nervión, donde la víctima trabajaba como ayudante especialista en el laboratorio de pruebas. A mediodía, la mayor parte de la plantilla se concentró en la plaza de Juan de Urrutia, en pleno centro de la localidad. En este acto se dio lectura a un escrito de la unión local de UGT, en el que se decía: «Han acabado con la vida de un trabajador que, con más o menos esfuerzo, colaboraba en el logro de una sociedad de hombres libres». Por la tarde, los trabajadores se volvieron a concentrar y participaron en una manifestación por la zona industrial.

Al funeral de anoche asistía la corporación municipal en pleno, tal como decidió en un pleno extraordinario celebrado el jueves por la tarde, en el cual también se adoptó el acuerdo, por parte de los cuatro grupos políticos a los que pertenecen los concejales, de condenar el asesinato. De los doce miembros de la corporación de Amurrio, cinco son del PNV, dos del PSOE y otros dos de UCD. Una agrupación independiente apoyada por Herri Batasuna consiguió cuatro puestos, aunque actualmente dos de ellos están dimitidos y un tercero se encuentra de vacaciones. El único concejal independiente asistente, al parecer vinculado a Convergencia Socialista Vasca (ESEI), aprobó la moción de condena y la asistencia del ayuntamiento al funeral.

La unión provincial de UGT, el comité ejecutivo del metal de este sindicato, el PNV y el PSOE han condenado en sendos comunicados el asesinato, realizado por dos jóvenes aún no identificados.