Un diputado de Unión de Centro Democrático abandona su partido en protesta por la política seguida en Andalucía

El interés informativo sobre el primer congreso-asamblea de la UCD de Andalucía se desplazó en el día de ayer del desarrollo de los debates de las tres comisiones -autonomía, organización y socioeconomía-, donde no se produjo ninguna sorpresa, hacia los movimientos de pasillo que comenzaron antes de lo esperado, a primera hora de la mañana, cuando el diputado por Málaga, José García Pérez, anunció su decisión de abandonar UCD e integrarse en el Grupo Mixto del Congreso, ante lo que él considera el fracaso de toda posibilidad de que UCD rectifique sus errores sobre Andalucía.

Otro tema permanente en la segunda jornada del congreso fue la continua referencia por diversas personalidades de UCD -Arturo Moya, Jiménez Blanco, Rodríguez Alcalde, Pérez Miyares, Cecilio Valverde- a la necesidad urgente de sentarse a la mesa con lossocialistas para desbloquear el proceso autonómico andaluz. En este- sentido se detectaba un ambiente favorable a buscar una salida por la vía del 151, sin que fuera preciso repetir el referéndum en Alrnería. Una votación planteada en los términos «sí o no a la reforma. de la ley de Referéndum» obtuvo 52 votos negativos, dos abstenciones y ningún voto afirmativo por parte de los miembros de la comisión de autonomías.El diputado José García Pérez volvió a ratificarse a primem hora de la tarde en su decisión de abandonar UCD, pese a la comida de reflexión que acababa de rnantener con el secretario general del partido, Rafael, Calvo Ortega, en la que participó como hombre bueno el diputado por Granada Arturo Moya, de la familia socialdemócrata, al igual que el dimisionario. Este rechazó la invitación de Rafael Calvo a que se tomara un tiempo antes de adoptar una decisión definitiva y se mantuvo en sus posiciones de ruptura con el partido centrista. Su razonamiento es que, en este congreso-asamblea, UCD ha perdido la oportunidad de adecuar sus planteamientos a la voluntad expresada por los andaluces el 28 de febrero. «UCD se la jugó democráticamente en esa consulta y perdió, y ya no cabe otra salida que aceptar que dos millones y medio de andaluces han dicho sí a una autonomía plena por la vía del artículo 151. Yo me niego a seguir en un partido que da la espalda a las urnas».

Ponencia autonómica

La primera comisión en ultimar sus trabajos fue la de autonomías, cuya ponencia fue aprobada por la asamblea de compromisarios a primera hora de la noche, con el apoyo de 191 votos, uno en contra y nueve abstenciones. En ella se afirma la voluntad de dotar a Andalucía de un régimen autonómico pleno en igualdad de competencias y de organización con las comunidades autónomas ya constituidas.

La cuestión de Almería fue tratada con un notable guante blanco, que indica que podría estar próximo el desbloqueo del artículo 151. Da la impresión de que la asamblea tiene constancia de que en Madrid se está buscando una salida al enfrentamiento con el PSOE; de ahí que se intentara introducir en la ponencia una referencia en el sentido de que en el tema autonómico UCD de Andalucía acataría la legalidad vigente en cada momento. Si bien es verdad que la comisión se pronunció en contra de la repetición del referéndum, miembros de UCD de Almería señalaron que ellos acatarían cualquier decisión que proviniera del Congreso de los Diputados. La próxima semana se votarán en el Parlamento las tres proposiciones de ley y una moción que pretenden la modificación, aunque el voto va a ser secreto, pero da la impresión de que el Gobierno guarda una carta definitiva, que tal vez se niega a enseñar en tanto Felipe González no se siente a la mesa de negociación.

La ponencia de configuración regional del partido, que todavía se estaba debatiendo a la hora de cerrar esta información, ha significado la derrota de los partidarios de una organización federal y una rotunda afirmación de UCD como partido nacional, aunque a través de la modificación del procedimiento para la elección de los cargos y el establecimiento de un régimen de incompatibilidad entre cargos nacionales y regionales puede conducir a una importante descentralización.

En cuanto a las posibles candidaturas para cubrir los cargos directivos regionales, se barajaban anoche dos alternativas: una, de corte continuista, gira en torno al actual presidente en funciones, Manuel Pérez Miyares; la otra, de corte más progresista, está promovida por las delegaciones de Sevilla, Cádiz, Jaén, la mayoría de Córdoba y algunos miembros aislados de Almería. Esta segunda opción presenta al senador por Cádiz, Pedro Valdecantos, como candidato a la presidencia; pretende presentar como secretario general a José Javier Rodríguez Alcaide, y como vicepresidente, a Miguel Sánchez Montes de Oca, de Sevilla, y probablemente a alguien en representación de Jaén. Caben, sin embargo, que se presenten otras opciones.

De todas formas, podría suceder que la renovación de los cargos regionales no se produjera en el transcurso de esta asamblea-congreso, en contra de lo anunciado el día de la inauguración. Para hoy se espera la llegada al acto de clausura del presidente del Gobierno y de UCD, Adolfo Suárez.