España
Lo que estamos perdiendo es España, mucha España, España a chorros, cuando España ha dado tanta España, y lástima que estas cosas las haya dicho siempre la derecha, porque ya casi no se pueden decir. Hasta Borges, ahora nuevamente recopilad o por Barnatán en Cátedra, es España/España, aparta de mí este cáliz, o Haro Ibars, que publica Empalador, poesía marchosa y under quil nos recuerda en el título, sin embargo, que somos una tierra de empalados, de empapelados, de emparedados, como empalada por la ucedé ha quedado España en el Congreso (o sea, con el mango de una pala inducido por mala parte), como empapelados están/estamos los chicos de los papeles (cuarto poder, pero empezando por abajo), y encima Miguel Angel Aguílar, iluminado de whisky, noticia y madrugada, expulsado por arriba, que es como se echa en España al personal, con esos ascensos ya vertiginosos y sospechosos, que son como manteamientos de Goya y Cervantes, maneras que tenemos aquí de empalar, de empapelar, de emparedar al personal, España,España.Fraga, desde la tele, quiere salvar España a su manera, que es quedándose con ella. En Manhattan sacan un libro mío en inglés, y me piden más para ir traduciendo, España, España, ¿cómo puedo yo explicarles a los yanquis que España es lo que hay alrededor de Torrejón, o sea mucho terreno de subdesarrollo, jumentos, gitanos, poetas, ministros, paletos y tías buenas? Olga Ramos, que salvaba en Madrid una cierta España, Olga Ramos, creadora del cuplé político, calle de la Palma, noche de bajomadrid y cadeneta, se ve expulsada, exiliada, desahuciada de sí misma, de su tiempo y el nuestro, porque en el local van a poner una hamburguer. Salvador Jiménez me escribe cariñoso desde México y me dice, Madrid/ Madrid/ Madrid, en México se piensa mucho en ti, que hasta se han llevado una réplica de la Cibeles. Lo cual que la Cibeles va pareciendo ya el monumento a la Constitución, tirada por los leones del Congreso y malherida de lametralla de García Morato, como la Constitución misma, que a pesar de todo es muy constitucional. Por el Rastrillo de Tetuán, calle de Marqués de Viana, se va en chamarilería la España del abuelo, nicotinada e institucionista, la España de la abuela, toda de abanicos filipinos y cartas de doña Emilia, o sea la Pardo Bazán. España enmudece en la voz hoy herida de mi querido Salvador Pániker, que le han operado de una cuerda, y es una de las pocas voces sensatas que se alzan en España. Los de la Sotheby's y los de Proarte me hacen una relación de la España real.y pintada que sale de España de Zurbarán a Juan Gris, por donde veo lo fácil que es sacar cuadros, pesetas, monedas, relojes del abuelo, acuñaciones españolas, y lo diricil que es reinstaurar España, que las aduanas no dejan y la moción salvadora del Congreso se nos ha ido por la vía de agua de 21 abstenciones y once ausencias. Tras quince días de dictar, el doctor Carreño, maestro cantero de la catedral sumergida y fracasada que ya es uno, me da de alta para escribir con el brazo manco, y madrugo a la máquina por escribir de España, federal o nacional, mínima o máxima, como filmando con la olivética roja la rauda ausencia de España. Niñas, niños de Cau que vienen todas las tardes a grabar mi palabra y preguntarme cosas, pero ninguno me pregunta por España., ¿Será que en los de quince años ya no hay España, la España cantada estos días en las Cortes por Fraga y por Carrillo? ¿Alguna vez hubo España?
Espasa-Calpe publica la edición completa de Los Toros, Cossío/Cañabate, y me pregunto si en este hermoso tomo, para el que hizo papeletas hasta Miguel Hernández, está la España minotáurica,de Paquiro-y de Picasso. Pero hoy la Monumental la llenan mejor Carrillo o Blas Piñar que Curro Romero. España ya se escapa Duero abajo, que al fin ponen la puente los pontoneros o pontífices del capital, por decisión de Ricardo de la Cierva (mejor ministro y humanista de derechas hubiera sido, un suponer, Senillosa). Hemos tirado España al Duero y el Duero por la ventana.
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