Los "críticos" de UCD no desean romper la disciplina de voto
Los diputados de origen socialdemócrata y liberal no romperán la disciplina de voto de UCD y se pronunciarán contra la moción de censura presentada por el PSOE contra el Gobierno. No obstante esta postura, anunciada ayer, su actitud final responderá a lo que haga de aquí a la votación el presidente Suárez y, en cualquier caso, el ala progresista de UCD va a exigir, dada la situación, un debate a fondo y una renovación total de la orientación política de su partido.
El socialdemócrata Francisco Fernández Ordóñez manifestó ayer que los diputados de esta corriente no romperán UCD en la votación de censura, ya que se interpreta que la voluntad de los electores centristas, en el caso de la moción de censura socialista, lo exige así. «Este es un tema muy serio, en el que estamos jugando completamente limpio», afirmó el líder socialdemócrata.De la misma opinión fue el diputado liberal Ignacio Camuñas. No obstante, en estos sectores se observa el deseo de que la moción de censura sirva: para replantear la política de UCD, y la constatación de que la difícil situación en que el voto de censura ha puesto al Gobierno da la razón a quienes resultaron derrotados en la pasada remodelación gubernamental.
Reunión de la permanente
La permanente y el comité ejecutivo de UCD han sido convocados para las seis y las ocho de la tarde de hoy, respectivamente, en el palacio de la Moncloa. Por la mañana se reunirá el Consejo de Ministros. En las tres reuniones se, tratará ampliamente la posición a adoptar cara al debate de la moción de censura. No es seguro que a la reunión de la permanente asista el líder liberal Joaquín Garrigues, dado su precario estado de salud. Garrigues visitó ayer la clínica donde ha estado varias semanas internado para cuestiones del tratamiento que sigue. De cualquier forma, se estima que su actitud es semejante a la de Francisco Fernández Ordóñez.Por otra parte, en las fuentes centristas consultadas se cree poco probable que el Gobierno intente contraatacar pidiendo el voto de confianza al Congreso. Entre otras razones, está el que ello obligarla a un acercamiento a Coalición Democrática, que a su vez pondría en peligro la actitud de los sectores progresistas de UCD, que considerarían un pacto con Fraga como opuesto al mandato de los electores centristas y, por tanto, se sentirían en libertad de actuación.
En cualquier caso, la votación favorable a Suárez por parte de las familias críticas de UCD, según las fuentes, no va a darse como un cheque en blanco, sino que se exigirá un cambio de rumbo que corrija los defectos que este sector ve en la actual política del Gobierno.
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