Paralizado indefinidamente el Parlamento navarro

Después de una tumultuosa sesión, que duró algo más de una hora y media, el presidente del Parlamento Foral de Navarra, Víctor Manuel Arbeloa, suspendió ayer indefinidamente el pleno de la Cámara, en el que debían debatirse los presupuestos de la provincia, debido a la postura de varios grupos parlamentarios que exigían a Jaime Ignacio del Burgo que abandonara el salón, acatando de esta forma el acuerdo adoptado el pasado 14 de abril, en el que se exigía su dimisión como presidente y diputado foral.

Al término de la sesión, los representantes del sector crítico de UCD mantuvieron una conversación telefónica con Calvo Ortega, secretario general del partido, para exponerle la delicada situación creada en las instituciones forales de Navarra, como consecuencia de la presencia de Del Burgo.Al comienzo de la sesión, el portavoz de Herri Batasuna, Iñaki Artxanko, solicitó la palabra para indicar que «la presencia del señor Del Burgo en esta Cámara supone reírse del Parlamento Foral. Exigimos que abandone la sesión, por respeto a las instituciones, ya que, de lo contrario, esto es una payasada». A su vez, el representante socialista, Gabriel Urralburu, expuso su criterio de que la sesión, una vez iniciada, debía continuar, ya que el tema que proponía HB no figuraba en el orden del día. Gómara, portavoz de UPN, después de indicar que Del Burgo era miembro de pleno derecho del Parlamento, pidió que se aplicara el reglamento y, en consecuencia, continuara el pleno.

En esta situación, el presidente de la Cámara tomó la palabra para explicar que no se podía discutir el orden del día aprobado por la mesa interina, ya que además «los presupuestos de Navarra son la materia más granada de todo el curso parlamentario». Sin hacer caso de la indicación del presidente, el representante del grupo abertzale Amaiur, Xabier de Antoñana, hizo uso de la palabra y recordó el acuerdo del pasado 14 de abril, para indicar a continuación que «si este Parlamento no es capaz de cumplir sus propios acuerdos, todos los acuerdos anteriores son nulos. Del Burgo debe abandonar esta sesión, ya que si no seremos el hazmerreír de Navarra y de eso, en fin, de España. Siento que no esté presente el diputado foral de Sanidad, pero esto está rayando en algo que necesita de la presencia de dos loqueros para sacar de la sesión al señor Del Burgo». Esta expresión motivó una protesta de Arbeloa.

Por su parte, Artxanko insistió en que debía cumplirse el acuerdo relativo a la dimisión de Del Burgo, y se preguntó si la institución foral iba a ser «un circo o un parlamento». En este momento de la sesión, con intervenciones fuera del orden del día, Arbeloa se dirigió a la Cámara para indicar que el pleno debía continuar «en paz y en orden, porque la opinión pública navarra nos lo está exigiendo». Después de que el presidente hiciera una llamada a la serenidad y a la cordura, Artxanko volvió a tomar la palabra para precisar que la mejor manera de destrozar el Parlamento era incumplir sus acuerdos. En este punto, Arbeloa le retiró la palabra para concedérsela al parlamentarlo de UPN, Añón. Sin embargo, Artxanko continuó hablando por el micrófono, al igual que Añón, por lo que se produjo una situación de confusión y alboroto, mientras Antoñana anunciaba su deseo de intervenir.

Mientras Arbeloa solicitaba a los parlamentarios que votasen el acta de la sesión anterior, y en medio de una gran confusión, Artxanko pedía que Del Burgo abandonara la sala, a pesar de las llamadas al orden del presidente. En esta situación, Arbeloa optó por suspender momentáneamente el pleno, mientras se reunía con los portavoces de los grupos. Después de una hora de receso, se inició de nuevo la sesión, con la indicación de Arbeloa de que «en estas condiciones es imposible celebrar dignamente una sesión en la que se debían debatir los presupuestos». No obstante, señaló que el pleno se iba a suspender de forma indefinida, después de que interviniesen los portavoces de los grupos.

De esta forma, Astrain (UCD) manifestó que Arbeloa debía asumir su responsabilidad y mantener el orden para que continuara el pleno. Urralburu (PSOE) precisó que la sesión se iba a suspender porque existía una causa grave anterior: el incumplimiento y la rebeldía de Del Burgo para acatar un acuerdo de la Cámara. Por su parte, Gómara (UPN) señaló que el Parlamento había sido elegido para trabajar por Navarra «y en este momento es imposible cualquier trabajo», mientras Artxanko (HB) insistía en que Del Burgo debía dimitir como diputado foral, como paso previo a cualquier otro acuerdo de la Cámara. A su vez, Olite (Amalur), después de indicar que debía cumplirse el acuerdo del pasado 14 de abril, precisó que «Del Burgo se acoge a su pretendida condición de virrey todopoderoso para no dimitir».

El parlamentario Jesús Uncini (PNV), sumándose a la petición de dimisión de Del Burgo, exigió a UCD que solucionara sus problemas internos, con el fin de que las instituciones forales pudieran continuar su labor. Por su parte, Zufía (Partido Carlista) señaló que «la postura de Del Burgo es de rebeldía y provocación. UCD debe responder de la situación actual y solucionar el problema». Antes de que finalizara la sesión, Arbeloa tomó la palabra para manifestar que «por el prestigio del Parlamento, por la paz y la dignidad de Navarra, a la que todos queremos servir, se levanta la sesión».