Belaúnde: "Superaremos el tope del 36% de los votos"

Depuesto por el golpe militar de octubre de 1968, Fernando Belaúnde Terry se presenta de nuevo en estas eleccíones presidenciales de hoy. Han tenido que transcurrir casi doce años para que se lleve a cabo el traspaso de poderes a los civiles y fue precisamente Belaúnde el último civil en ocupar la presidencia de la República.Pregunta. Señor Belaúnde: después de su «pasada experiencia», ¿que piensa poder aportar de positivó a la política peruana?

Respuesta. La etapa presidencial que yo cumplí fue altamente posítiva. Mi Gobierno fue esencialmente constructivo y se inspiró en la realidad nacional. Y en caso de llegar a obtener la mayoría suficiente, reforzaremos ambas caracteristicas.

P. ¿Cree que logrará conseguir la cifra de más del 36%, que es necesaria para alcanzar la presidencia?

R. Según los cálculos de Acción Popular, debemos conseguir el 40% de los votos. Dichos cálculos están basados en encuestas actuales y en los antecedentes electorales.

P. ¿Cuál sería el partido a escoger en caso de tener que llegar a pactar en el Congreso? ¿Tiene AP alguna preferencia?

R. El veredicto del pueblo, reflejado en la composición del Parlamento, será determinante del camino a escoger. No podemos prejuzgar al respecto.

P. Tiene usted sobre sus espaldas una grave acusación que se refiere a unos contratos petroleros con las multinacionales norteamericanas y del cual misteriosamente ha desaparecido una página.

R. Mire usted (nos dice algo excitado): se trata de una patraña urdida para derribar al régimen constitucional en 1968, y reeditada ahora con el inútil intento de detenernos.

P. Habla usted mucho de las obras realizadas durante su mandato y, sobre todo, de los planes que fueron abortados por el golpe y que más tarde, según usted, fueron llevados a cabo por los militares. ¿Pero qué medidas dictará si sale elegido?

R. Fundamentalmente, las que se refieren al empleo y al abastecimiento como medidas iniciales. Naturalmente, nos empeñaremos con toda decisión en la promoción del desarrollo, tal como lo hiciéramos durante el quinquenio de la libertad...

P. La gente se pregunta sobre la voluntad de los militares para entregar el poder. A un hombre como usted, que fue depuesto precisamente por los hombres que componen el actual Gobierno del general Morales Bermúdez, no debió hacerle mucha gracia que le sacaran de madrugada y en pijama del palacio presidencial aquella madrugada del 3 de octubre de 1968...

R. Oiga: cuando fui depuesto no sólo estaba correctamente vestido, sino que, encontrándose el palacio rodeado, había impartído las más severas órdenes para resistir el golpe.

P. ¿Mantendría, pues, al Perú dentro de las mismas directrices en que actualmente se desenvuelve en el plano de la política internacional?

R. Tendremos una diplomacia amplia, propiciando la amistad con todas las naciones, pero manteniendo los ojos bien abiertos para no prestarnos a juegos ajenos ni a liderazgos discutibles.

La inspiración princípal será mantener la unidad de la familia latinoamericana.

P. Parece ser que cuando estaba de presidente de la República del Perú colaboró en algún momento con la CIA...

R. La dictadura de Velasco, coludida con plumarios del exterior, difundió esa especie. Todos conocen en Perú la forma independiente y digna como resguardé la soberanía nacional.

P. Otra grave acusación quecírcula sobre el ex presidente Belaúnde es algo relacionado con quema de libros y restricciones a la libertad de información...

R. No sé de donde habrá obtenído eso de la restricción, pero le diré que es conocida nuestra trayectoria de respeto a la líbertad de prensa. Y que nunca se ejerció con mayor, amplitud que durante nuestra administración.

P. Por último, usted habló sobre la dictadura de Velasco. ¿Guarda relación el proceso español recién salido de una dictadura militar con el peruano?

R. Existe una diferencia fundamental, puesto que nosotros no salimos de una cruenta guerra civil, sino de una larga dictadura militar, a la que el pueblo quiere poner término para reencontrar el cauce constitucional. Esa es la similitud.