"Cumbre" militar en la Zarzuela para elaborar el ciclo de la defensa nacional
La reunión de trabajo que ayer presidió el rey Juan Carlos en el palacio de la Zarzuela, con los máximos responsables del Gobierno, en materia de defensa, incluido el presidente Adolfo Suárez y la Junta de Jefes de Estado Mayor, para estudiar aspectos relacionados con el cielo de la defensa, ha tenido lugar veinticuatro horas antes de que el Pleno de las Cortes prosiga sus debates sobre la ley orgánica de Criterios Básicos de la Defensa y Organización Militar.En la reunión de ayer, que tuvo lugar a partir de las 18.30, se abordé, con toda probabilidad, el estudio del ciclo de política de defensa, que se inició hace algunos meses y que ya fue objeto de una reunión de idénticas características. Este ciclo incluye, entre otros aspectos de capital importancia, el plan estratégico conjunto y el plan logístico de alto nivel.
Durante el debate en el Pleno del Congreso de los primeros artículos de la ley orgánica de la Defensa se planteó una pugna entre socialistas y centristas -que arrastraba desde el debate en ponencia y en comisión-, por el que los primeros pretendían que el plan estratégico conjunto se mantuviese como documento secreto, mientras que el objetivo de fuerza conjunto debía ser debatido y aprobado en el Parlamento.
A esta postura se opuso UCD e hizo prosperar su pretensión de que uno y otro se mantuviesen corno secretos, por entender que estaban directamente relacionados y que el objetivo de fuerza no era sino una consecuencia del plan estratégico.
El debate de la ley orgánica en el Congreso se produce, por tanto, en paralelo a la elaboración de los grandes documentos que configurarán la política de defensa de los años ochenta y que, de acuerdo con las manifestaciones del ministro de Defensa, Agustín Rodríguez Sahagún, y de altos mandos militares, suponen no sólo el modificar aspectos sustanciales de la actividad y la organización castrense, sino la posibilidad de contar por vez primera, con un plan coherente y global sobre estos aspectos para toda la década de los años ochenta. Rodríguez Sahagún había adelantado que en la reunión de ayer, que presidió el Rey, estaba previsto ofrecerle información sobre diversos temas y entre ellos, como más destacados, el nuevo plan de defensa nacional, las directrices de la política militar, el estado de los trabajos sobre el objetivo de fuerza conjunto, las bases del plan logístico de alto nivel, los objetivos de relanzamiento de la industria española de armamento y, posiblemente, el calendario de desarrollo legislativo, que también ha hecho público con anterioridad el ministro de Defensa.
La reunión de ayer no reviste, según insisten fuentes oficiales, ningún carácter extraordinario, como no sea por la importancia de los asuntos que se debaten. Ello explica la presencia del Monarca como jefe supremo de las Fuerzas Armadas; del presidente del Gobierno, que lo es además de la Junta de Defensa Nacional, del vicepresidente encargado para los asuntos de Defensa, teniente general Manuel Gutiérrez Mellado, además del titular de la cartera de Defensa y la Junta de Jefes de Estado Mayor, integrada por su presidente, teniente general Ignacio Alfaro, y los jefes de Estado Mayor, de los tres Ejércitos: teniente general José Gabeiras (Tierra), teniente general Emiliano José Alfaro (Aire), y almirante Luis Arévalo (Armada).
Otro dato que subraya la importancia de la reunión es el aplazamiento de la que tenía previsto celebrar la recién creada comisión permanente de UCD, convocada inicialmente para ayer bajo la presidencia de Suárez.
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